El reinicio de la Superliga quedó bajo ayer bajo un manto de sospechas, luego que un grupo de clubes, encabezados por el presidente de San Lorenzo, Marcelo Tinelli, solicitara la postergación debido a que se superpone con la disputa del Preolímpico Sub 23 de Colombia. La posición es la de sostener y apoyar esta idea, entendiendo que la ley debe ser pareja para todos”, indicó Tinelli en su cuenta de Twitter.
El elenco de Boedo alega que con la cesión de Adolfo Gaich y Marcelo Herrera, tendrá desventaja respecto de otros clubes. El preolímpico comienza el 18 de este mes y ocupará” tres de las siete fechas que restan para finalizar el torneo. La situación fue respaldada por AFA, que culpó a la Superliga por no contemplar la situación y la saturación de calendarios. La respuesta no se hizo esperar, ya que la Superliga emitió un comunicado en el que señaló que las fechas programadas para el primer semestre del año 2020 han sido aprobadas en tiempo y forma por el Comité Ejecutivo de la SAF, no siendo facultad del Presidente de la misma poder modificar las mismas, en ningún caso. La Mesa Directiva tampoco puede reprogramar los partidos, en el caso que ello implique la alteración de las fechas previstas para la finalización de las competencias”.
Al respecto, Andrés Fassi, presidente de Talleres, apoyó la postura de la Superliga, al señalar que no se puede borrar con el codo lo que se firmó”. A Talleres le hubiese convenido que el inicio se retrasara, pero es injusto y no tiene sentido violar un acuerdo que fue decidido por decisión unánime sólo porque algunas instituciones quieren sacar ventaja”, explicó. El trasfondo de esta disputa en ciernes tiene que ver con el pedido, conocido días atrás, de algunos clubes para que la AFA vuelva a tomar el control de los campeonatos y analice romper el vínculo con los canales de televisión que transmiten los partidos. Claramente, todo está teñido por el cambio del rumbo político que se observa en país desde diciembre.
Mayoría absoluta
Un rápido punteo” de voluntades mostró que 16 clubes están a favor de la postergación, mientras que cuatro están en contra. Además, otros cuatro aún no expresaron su voluntad.