El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) advirtió en las últimas horas que la mitad de los niños y niñas de Argentina es pobre. “En Argentina, la principal deuda con la niñez está vinculada a la pobreza, entendida como un problema estructural, que va más allá de la falta de ingresos”, explicó la representante del organismo, Luisa Brumana. “Cambiar esta realidad debe ser la primera responsabilidad del Estado”, añadió.
Las declaraciones de Brumana surgieron tras la publicación del informe titulado “La Convención sobre los Derechos del Niño en una encrucijada”, un documento que forma parte de las conmemoraciones del 30º aniversario de la Convención sobre los Derechos del Niño (CDN). En este marco, la especialista detalló que, en los últimos 30 años, no se pudo perforar el 30% de pobreza en la población conformada por niños, niñas y adolescentes.
La situación que atraviesa uno de los sectores más vulnerables de la sociedad también fue abordada en un reciente informe del Observatorio de la Deuda Social Argentina de la Universidad Católica Argentina (UCA). En el documento, elaborado para el presidente electo, Alberto Fernández, la casa de altos estudios sostuvo que la cantidad de niños y adolescentes de entre 0 y 17 años con hambre pasó del 9,6% en 2016 al 14,1% en 2019.
El informe fue presentado por el director del Observatorio de la UCA, Agustín Salvia, en el marco de la primera reunión de trabajo que organizó el Frente de Todos (FDT) el viernes pasado, con el objetivo de avanzar en el plan “Argentina contra el hambre”. La iniciativa fue ideada por el supuesto futuro ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, quien la definió, el pasado sábado, como “más que un programa”. Para el actual diputado nacional, se trata de “una política de Estado”.
En la mesa de diálogo se sentaron Fernández, Arroyo, Salvia y el conductor de televisión, Marcelo Tinelli, entre otras figuras destacadas. “En esa mesa de diálogo están sentados los sectores que pueden ayudar a crear una política contra el hambre”, resaltó el secretario general del Movimiento Evita, Emilio Pérsico.
El diputado Arroyo dio detalles del plan “Argentina contra el hambre”
De acuerdo con las definiciones de Arroyo, el programa tendrá un seguimiento en tiempo real que será analizado a través de tres indicadores: inseguridad alimentaria severa (hambre), malnutrición y pobreza. En la misma línea, el diputado agregó que el mecanismo para combatir el hambre será “una tarjeta de alimentos para las madres que tienen chicos menores de seis años”, que sólo les permitirá comprar comida y, en base a esas compras, “sugerirá qué tipos de alimentos comprar”.
Además, reveló que la tarjeta permitirá comprar todo tipo de alimentos y bebidas, excepto bebidas alcohólicas, pero habrá 13 rubros de la canasta básica que tendrán “descuentos especiales”. El encuentro que montó Fernández en sus oficinas del microcentro porteño contó con la presencia de Tinelli, y de la chef Narda Lepes, entre otras figuras destacadas. “Tinelli tiene claramente un compromiso social”, explicó Arroyo antes de advertir que “no va a tener ningún cargo” en la próxima administración. Por el contrario, explicó que todo lo que se hace en el Consejo Federal Argentina Contra el Hambre “es ad-honorem” y no crea “ninguna estructura estatal”. El rol de Tinelli también fue explicado por Fernández, en declaraciones radiales.
“Asumió el compromiso de difundir el problema en su programa, que es de los más vistos”, detalló el futuro Presidente. En tanto, Lepes “planteó una serie de temas sobre lo saludable o no de determinados productos que hay que empezar a revisar”, añadió el Arroyo. Fernández también valoró el aporte de la cocinera: “Nos explicó que el problema de la Argentina no era necesariamente el hambre sino lo mal que se come”.