La suspensión por seis meses de los aumentos tarifarios decidida por el presidente de la Nación, Alberto Fernández, tendrá poco efecto en Córdoba. De hecho, el único servicio que no registrará subas, en lo inmediato, es el gas. La situación es diferente para la tarifa eléctrica. La suspensión de Fernández sólo aplica para el costo de la energía mayorista.
Sin embargo, ese es sólo un tercio de los ítems que componen la boleta. Las otras dos partes devienen del transporte y la distribución y de las tasas e impuestos aplicados. Y como la Empresa Provincial de Energía de Córdoba (Epec) decidió no congelar sus montos por el servicio que presta, las boletas de los usuarios residenciales ya vienen con un incremento de 7,8%. Por otra parte, el servicio de agua sumó dos aumentos en la capital. Comenzaron a regir a partir de este mes. El primero es de 9% (que pasará a 16% en el segundo semestre) y corresponde al Fondo de Infraestructura para el Suministro de Agua Potable. Lo cobrará la Provincia y tendrá como destino la ejecución de obras de infraestructura que no puede asumir Aguas Cordobesas. Además, el Ente Regulador de los Servicios Públicos (Ersep) aprobó una suba de 14,1%, con lo cual, el incremento total será de 23%.
Por otra parte, las contribuciones municipales registrarán aumentos de entre 41% y 53%, teniendo en cuenta la valuación fiscal de las propiedades. El Inmobiliario Urbano provincial, en tanto, tendrá un incremento de entre 41% y 44%, dependiendo de la situación de cada contribuyente. Al igual que con la luz, el congelamiento de las tarifas en el transporte es acotado en Córdoba. Por lo tanto, los colectivos que recorren la provincia y la ciudad tendrán aumentos.