El detenido ex jefe de Operaciones Especiales de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) Alan Ruiz admitió ayer ante la justicia que hizo tareas de inteligencia sobre el Instituto Patria y la actual vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner y sostuvo que fueron acciones «que estaban justificadas legalmente».
Ruiz declaró varias horas ante el juez federal de Lomas de Zamora Juan Pablo Auge, quien sustancia la causa por las tareas de seguimiento supuestamente ilegales sobre el Instituto Patria (el «tanque de ideas» del kirchnerismo) durante el gobierno de Mauricio Macri.
El ex espía, quien fue detenido el reciente fin de semana y ayer pidió la excarcelación, aseguró además que «no hubo escuchas telefónicas ni filmaciones», insistiendo con su creencia sobre la legalidad de los operativos, informaron fuentes vinculadas con el caso.
Ruiz, imputado por presunta violación de la ley de inteligencia y falsedad de documentos públicos, «negó haber hecho tareas ilegales, afirmó que estaban justificadas legalmente», insistieron las fuentes.
La violación de la ley de inteligencia se le achaca en el espionaje al Instituto Patria y al domicilio de la ex presidenta y la falsedad de documento público se le imputa por el material utilizado para justificar esas dos operaciones.
Los portavoces indicaron que Ruiz «dijo que efectivamente participó de los operativos en torno a esos dos domicilios, pero que fueron en un marco de legalidad porque estaban sindicados como lugares de posibles atentados».
Además, dejaron trascender que «entre otros lugares probables en los que se hicieron operativos de vigilancia externa en perímetros fueron la casa de (el vicejefe de gobierno porteño Diego) Santilli y la de (la ex ministra de Salud kirchnerista y actual diputada nacional macrista) Graciela Ocaña».
También, añadieron, confirmó que «en algunos casos las órdenes para esos operativos emanaban directamente de Silvia Majdalani (la ex número dos de la AFI, detrás de Gustavo Arribas) aunque mencionó también otras áreas como la Dirección de (anti) Terrorismo». Sobre los documentos cuestionados dijo que «esperaría a verlos para poder explicarlos».
Ex espía dijo que «toda la información subía de manera pormenorizada a Majdalani y a Arribas»
La ex agente de la AFI Mercedes Funes Silva sostuvo ayer por escrito ante la comisión bicameral de Control y Seguimiento de Organismos de Inteligencia que toda información que recolectaba el equipo que integraba subía de manera pormenorizada a (Silvia) Majdalani y (Gustavo) Arribas”, ex director y subdirectora, respectivamente, de ese organismo durante el gobierno de Cambiemos.
La ex espía estaba llamada a declarar ante la comisión, en el marco de las reuniones que mantiene ese cuerpo para analizar las denuncias sobre espionaje ilegal durante el gobierno de Mauricio Macri, pero se limitó a presentar un escrito de su autoría y rechazó la posibilidad de responder preguntas.
La AFI era una sola y su estructura de mando también era única, piramidal y comenzaba en Gustavo Arribas, continuaba en Silvia Majdalani y en lo que respecta a la cadena de mandos mis superiores fueron las personas que ocuparon sucesivamente el cargo de director de Contrainteligencia, de Operaciones y Operaciones Especiales”, sostuvo, según el contenido del escrito.
En el texto enviado a los diputados y senadores nacionales que integran la comisión, Funes Silva relató que «el 5 de enero de 2016» fue «convocada al ministerio de Justicia y Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires», donde le informaron que había sido trasladada en ‘comisión externa’ a la Agencia Federal de Inteligencia”.
En ese momento se me hizo entrega de un sobre cerrado dirigido a Majdalani; y el traslado no me llamaba la atención porque conocía a -Jorge- Sáez -ex suboficial del Servicio Penitenciario Federal-, con quien compartí destino en la policía porteña”, continuó.
Recordó que ese mismo día” se entrevistó junto a Sáez y a –otro ex espía, Leandro- Araque, con –Diego- Dalmau Pereira, quien se presentó como director de la AFI y adelantó que estarían bajo sus órdenes”. Participé de innumerables actividades vinculadas con inteligencia criminal, relacionados con lavado de activos, pedofilia y encubrimiento”, enumeró.
Funes Silva dijo también que desde la llegada de Alan Ruiz, que era director de operaciones especiales, otros agentes hicieron comentarios personales y en los grupos de Whatsapp, diciendo que les habían ordenado la realización de seguimientos a políticos y periodistas”
Esa circunstancia me llamó la atención (porque podrían constituir tareas operativas impropias o ilegales) por lo que inmediatamente le trasmití mi inquietud a Ruiz, quien me aseguró que debían cumplirse debido a requerimientos judiciales”, detalló en el escrito.
En ese sentido, dijo que no intervino en operativos de esa índole” y que siempre manifestó a Ruiz lo que la inquietaba”. «Todas y cada una de mis actividades en el organismo estuvieron en pleno conocimiento de las máximas autoridades que conformaban la cadena de mando íntegra del organismo. Jamás observé que escisión o independencia de la actividad de los directores respecto de los superiores máximos, todo lo contrario”, aseveró.
En su relato, reveló: En el mes de setiembre u octubre de 2018 me fue informado que junto a otros compañeros pasábamos a cumplir actividades en la Dirección de Operaciones Especiales”.
Yo estuve en ese lugar, me desempeñé como integrante de los equipos de trabajo, se me ordenaron y confeccioné distintos informes, siendo que incontables veces me fue advertido de su importancia porque serían recibidos por las máximas autoridades del organismo”, apuntó.
Por su parte, Emiliano Matta, otro ex agente de la AFI que aparece implicado en la causa que lleva adelante el juez Federico Villena en Lomas de Zamora, mandó un mail a la comisión y se excusó de asistir por cuestiones médicas. Dijo que había recibido la citación el pasado martes y que un día después debió atenderse en el Hospital Pirovano por «trastronos de hipertensión».
Desde la comisión le pidieron que acredite su situación con documento médico pertinente y lo volvieron a citar para próximo lunes.
Para hoy, en tanto, la comisión convocó a exponer el ex director de Contrainteligencia Dalmau Pereyra y al empresario Martín Terra, cercano a Arribas y ex esposo de la actual mujer del vicejefe de gobierno porteño, Diego Santilli, quien también habría sido víctima del espionaje.
Según relató la semana pasada ante ese cuerpo parlamentario el ex espía Jorge «Turco» Sáez, Pereyra le comunicó que se había reunido con Arribas, quien dio la orden de espiar a políticos, en particular a peronistas.
En el marco de las reuniones que mantiene la comisión, el viernes habían sido citados la ex secretaria de Documentación de la Casa Rosada Susana Martinengo y Ruíz, quienes no concurrieron a exponer ante ese cuerpo.
Martinengo se amparó en su derecho de excusarse, ya que los civiles tienen esa posibilidad, pero Ruíz fue detenido el sábado último y será indagado hoy, por orden de la justicia federal de Lomas de Zamora, en una causa que investiga supuestas maniobras de espionaje ilegal sobre el Instituto Patria, en agosto de 2018.