Millones de mujeres salieron ayer a las calles de todo el mundo en rechazo a la violencia machista y la perpetuación de un sistema de organización social patriarcal, reclamando el fin de los femicidios y travesticidios, la puesta en práctica del aborto legal, la educación sexual integral y la igualdad laboral, entre otras demandas, al conmemorarse el Día Internacional de la Mujer Trabajadora. En ese marco, el presidente Alberto Fernández saludó a las mujeres y manifestó su compromiso para terminar con la desigualdad” de género.
Me enseñaron muchas cosas en el último tiempo. Entre ellas, a no decirles feliz día el 8 de marzo hasta que terminemos con la desigualdad”, enfatizó Fernández en su cuenta de la red social Twitter. Utilizando el lenguaje inclusivo, el jefe de Estado brindó su compromiso” para alcanzar un Estado que trabaje para que todas, todos y todes tengamos las mismas oportunidades”. El mensaje presidencial ocurrió en medio de una jornada signada por las demandas feministas, presentes en redes sociales y principalmente en las calles del país.
La movilización más convocante tuvo lugar en Capital Federal, frente a la Catedral porteña, que congregó a militantes de partidos de izquierda y organizaciones sociales para reclamar la separación de la iglesia del Estado y la deuda del aborto legal, seguro y gratuito, entre las principales consignas. Pero el plato fuerte tendrá lugar hoy a partir de las 16, con una convocatoria a concentrar en Plaza de Mayo para marchar hacia el Congreso nacional, donde se espera un multitudinario ‘pañuelazo’ verde, a pocos días de que el Gobierno presente, según prometió Fernández en la Asamblea Legislativa, un proyecto sobre interrupción voluntaria del embarazo hasta la semana 14 de gestación. La movilización de hoy se realizará en simultáneo a un paro nacional de mujeres. Los colectivos feministas se manifestaron ayer luego de que por la mañana el Episcopado convocara a una multitudinaria misa en la Basílica de Luján.
Cifra histórica de bancas en Diputados
La presencia de mujeres en la Cámara de Diputados supera el 40%, un 35% más que en 1983, cuando sólo se registraba un 5%. Sin embargo, aún presenta dificultades para poder alcanzar el pretendido 50%, debido a la mayor presencia de varones encabezando las listas de candidatos legislativos registrados en los últimos procesos electorales. Con el inminente ingreso de Claudia Bernazza, la reemplazante del renunciante Daniel Scioli, la Cámara baja tendrá desde los próximos días 107 diputadas, el número más alto alcanzado en su historia, y un promedio de 41,63 del total de la Cámara, integrada por 257 miembros. El centenar de diputadas se afianzó recién entre 2016 y 2017, aunque había alcanzado un pico previo a fines de 2009, debido a los cambios registrados por renuncias, fallecimientos y sus reemplazos.
Amplia agenda de género en el Congreso
El Congreso Nacional deberá tratar este año un nutrido paquete de leyes, además de la legalización del aborto y la protección de las mujeres embarazadas, vinculados a los derechos de las mujeres para asegurar la paridad de género en todas las instituciones políticas, deportivas, y científicas. Esta agenda es impulsada por legisladoras de todos los partidos políticos, con acuerdos transversales a todos los bloques parlamentarios. Los proyectos están vinculados con la tipificación del delito del acoso sexual, la portación de armas para los acusados de violencia para la mujeres, el cupo femenino en el ámbito científico en cooperativas y mutuales y entidades deportivas. La mayoría de estas iniciativas ya fue votada por Diputados en la última sesión ordinaria de la Cámara baja y ahora deben ser analizados por el Senado.