El panorama político en Venezuela se ve sacudido por tensiones y disputas en torno a las próximas elecciones presidenciales. Corina Yoris, la candidata presidencial respaldada por la coalición opositora Plataforma Unitaria Democrática (PUD) denunció el lunes que el régimen de Nicolás Maduro está obstaculizando su inscripción formal, a pesar de que el plazo para registrar candidaturas para las elecciones del 28 de julio expiró el mismo lunes 25 de marzo. Finalmente, las 13 candidaturas aceptadas por el Consejo Nacional Electoral incluyeron la de la PUD, aunque no la de Yoris. La principal coalición opositora postuló, de manera provisional, a Edmundo González Urrutia, debido a las trabas que, según denunció, existieron durante el plazo de inscripción para postular a Yoris.
Yoris fue seleccionada por la mesa opositora como la candidata para reemplazar a María Corina Machado en la carrera presidencial. Machado, quien había ganado las primarias opositoras de octubre de 2023 con el 92% de los votos, fue inhabilitada en enero para ocupar cargos públicos hasta 2036, negándosele la oportunidad de participar en la contienda. En una publicación en su cuenta de X este lunes, Machado afirmó: «Si el candidato es elegido por Maduro, no se puede considerar como unas elecciones legítimas”. El Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela inhabilitó a Machado para postularse como candidata presidencial después de que la Contraloría General de Venezuela la sancionara por presuntamente no declarar el pago de bonos de alimentación en su declaración de patrimonio. Machado ha denunciado que esta inhabilitación es ilegítima y ha continuado llevando a cabo campañas en todo el país en contra del gobierno.
En el último día del plazo de registro establecido por el CNE, Maduro presentó su candidatura y se registró como candidato por el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV). Allí, le dijo a la oposición que «habrá elecciones con o sin ustedes”. Además de las mencionadas candidaturas de González Urrutia y Maduro, también fueron admitidas las candidaturas de Manuel Rosales, Enrique Márquez, Antonio Ecarri y Juan Carlos Alvarado para las elecciones en Venezuela. Benjamín Rausseo, Javier Bertucci, José Brito y Claudio Fermín confirmaron la admisión de sus candidaturas, mientras que Daniel Ceballos, Luis Eduardo Martínez, Luis Ratti y González Urrutia lo informaron a través de la red X.
Con un variado espectro de candidatos, las próximas elecciones, en principio, parecerían ser un escenario de competencia política diversa y activa en el país. Sin embargo, el caso no es tan así.
De acuerdo con los opositores, el sistema permitió, en general, la candidatura de candidatos “títeres”, amables al régimen de Maduro. Machado convocó a una «protesta mundial» para el próximo sábado 6 de abril en respuesta al bloqueo electoral impuesto por Maduro de cara a las elecciones presidenciales del 28 de julio. A través de un mensaje acompañado de un video, la candidata unitaria de la oposición instó a los venezolanos en el extranjero a alzar la voz en varias ciudades del mundo contra esta medida, la cual atribuye al “dictador venezolano”, que busca un tercer mandato consecutivo en julio. Machado afirmó la importancia de que el mundo escuche sus demandas y llamó a no permitir que Maduro determine quién será el candidato opositor. Asimismo, exhortó a los migrantes a registrarse en los consulados para participar en los comicios, destacando los retrasos en este proceso en varios países y solicitando denunciar cualquier impedimento. Aunque no especificó las ciudades donde se llevarán a cabo las protestas, Machado enfatizó la necesidad de mostrar “una Venezuela unida y decidida en su búsqueda de libertad”.
Por otro lado, para el oficialismo, la situación es muy diferente. Rander Peña, viceministro para América Latina de la Cancillería de Venezuela, alertó sobre lo que considera una «operación de propaganda internacional» destinada a imponer una narrativa de guerra en el contexto de las elecciones presidenciales del 28 de julio. Durante un conversatorio virtual en el que participaron líderes, movimientos sociales y medios de comunicación latinoamericanos, Peña destacó la supuesta estrategia de la líder opositora María Corina Machado para difundir una «matriz comunicacional falsa» que justifique una posible intervención militar en Venezuela. El funcionario venezolano mencionó el intento de ataque de un militante opositor durante la presentación de la candidatura presidencial de Maduro como parte de los eventos que respaldan su afirmación.
Las tensiones políticas en Venezuela evidencian un entorno marcado por la polarización y la desconfianza en el proceso electoral. La exclusión de Corina Yoris como candidata presidencial respaldada por la oposición, junto con las denuncias de María Corina Machado sobre el bloqueo electoral impuesto por Nicolás Maduro, plantean serias interrogantes sobre la transparencia y la equidad en el proceso democrático del país.
A pesar de la admisión de múltiples candidaturas, la percepción de que el sistema favorece a figuras afines al gobierno genera inquietudes sobre la legitimidad de las elecciones venideras. La convocatoria de Machado a una protesta mundial refleja la determinación de la oposición de hacerse oír y resistir las barreras impuestas por el gobierno. Todo lo hecho hasta ahora por la comunidad internacional, en el marco de un país que parece desconocer, tampoco ha sido de demasiada utilidad para los venezolanos.