Gente muy brava

El ojo de Horus

Gente muy brava

Las caras de los jueces de la Cámara Sexta del Crimen, Brandan, Buteler y Díaz Reyna, y las de los jurados populares lo decían todo: los cinco acusados, cuatro de ellos hermanos Olmedo Guzmán, metían miedo sólo con sus miradas. Ocurre que hay violentos y asesinos que pasan desapercibos porque lo disimulan muy bien, pero claramente no era este el caso.

El hecho que se juzgó fue otro de resaca urbana, en una disputa entre vecinos de barrio Ameghino Norte, el 25 de septiembre de 2021. La víctima fue Alberto Bravo de 45 años, padre de Nahuel Martín, quien se hizo famoso por ser el motochorro de Nueva Córdoba, que en los primeros días de agosto pasado quedó escrachado por filmaciones cuando acompañado por un cómplice no identificado aún se bajó de la moto, rompió la ventanilla derecha de un vehículo en Ambrosio Olmos al 800, y le robó la cartera a una automovilista.

Ahora bien, en relación al enfrentamiento a balazos por una disputa de territorialidad en un barrio super rojo por la tremenda maraña de marginalidad, los Bravo habían baleado la casa de los Olmedo Guzmán, lo que generó un contrataque mortal con un impacto en el pecho de Alberto, quien alcanzó a gritar: «Me pegaron». Luego, a modo de ejecución, Milton Olmedo Guzmán lo baleó en la cabeza para terminar así con la disputa y la lluvia de balas.

Con la acusación del fiscal Martín Berger, los cuatro hermanos Olmedo Guzmán fueron condenados: Milton a 20 años a prisión y Leandro, Wilson y Dilan a entre 6 y 7 años de cárcel. Todos jóvenes nacidos y criados bajo la cruz de la violencia y forjados en el peor de los contextos. Como alguien dijo con sarcástica ironía, a Alberto Bravo lo mató gente muy brava.

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