Boca quedó anoche eliminado en los octavos de final de la Copa Libertadores. El Xeneize cayó por 3-1 en los penales frente a Atlético Mineiro, luego de igualar por 0-0 en la revancha en Belo Horizonte. El VAR volvió a ser protagonista de una serie llena de polémicas: le anularon un gol al Xeneize con la tecnología, al igual que en la ida. Ahora, el Galo espera por River o Argentinos.
A los 17 del segundo tiempo, otra vez el VAR fue protagonista del duelo entre ambos equipo. Marcelo Weigandt aprovechó un error de Éverson tras un tiro libre y marcó el 1-0 a favor del Xeneize.
Sin embargo, el árbitro Esteban Ostojich decidió revisar la jugada con la tecnología. Con el recuerdo fresco del escándalo en la ida con el gol anulado a Diego González. Finalmente, el réferi anuló el gol considerando que hubo posición adelantada de Diego González, lo que desató la furia en el banco de Boca.
En lo que quedó del encuentro, no hubo chances de peligro (salvo un remate de Pavón y otro de Borrero para el Galo en los últimos minutos) y la llave se definió por penales. Nacho Fernández, Junior Alonso y Éverson (quien le atajó los penales a Sebastián Villa y Esteban Rolón) fueron los autores de los tantos para el local. Además, Carlos Izquierdoz la tiró afuera. Finalmente, Mineiro se impuso por 3-1 y pasó de ronda: espera por River o Argentinos en los cuartos de final.