Chelsea se consagró hoy campeón del Mundial de Clubes, por primera vez en su historia, al superar a Palmeiras, por 2 a 1, en tiempo suplementario, tras empatar 1 a 1 en el tiempo reglamentario, en la final disputada en Abu Dhabi, Emiratos Árabes Unidos.
Los goles del conjunto de Londres fueron del belga Romelu Lukaku (8m. ST) y del alemán Kai Havertz (115m. 2do. TE), de penal, mientras que igualó momentáneamente Raphael Veiga (19m. ST), de penal.
Chelsea conquistó de esta manera por primera vez el Mundial de Clubes, ya que en el 2012 cayó con Corinthians, de Brasil, al tiempo que Palmeiras continúa sin el título del mundo -perdió en 1999 con Manchester United por la Intercontinental.
Chelsea buscó por todos los medios romper el cerrojo defensivo de Palmeiras, que ejecutó a la perfección su plan con la excepción del cabezazo de Lukaku tras un centro certero desde el costado izquierdo.
Sin embargo, el conjunto dirigido por el portugués Abel Ferreira se repuso rápidamente y aprovechó un penal infantil cometido por Thiago Silva cuando iban 19 minutos del complemento.
Desde allí, Chelsea solamente tuvo la pelota aunque sin daño para el fondo brasileño, que sacó todos los córners que llovieron en los últimos minutos del tiempo regular.
Palmeiras sintió el cansancio y en la primera prórroga se arrinconó cerca del arco de Weverton, lo que llevó a Chelsea a adelantarse y a tener opciones claras aunque se mantuvo el empate.
El premio para Chelsea llegó cerca del final del segundo tiempo extra cuando una mano de Luan, revisada por el VAR, derivó en el penal que le dio la victoria tras la ejecución de Kai Havertz -mismo autor del gol del título de la Liga de Campeones-.
Sobre el final, Luan se fue expulsado por una falta sobre Havertz, que se iba de cara al tercero.
Previamente, Al Ahly, de Egipto, se quedó con el tercer lugar al golear a Al Hilal, de Arabia Saudita, por 4-0.