Lewis Hamilton llevaba casi dos años sin poder disfrutar de subirse al escalón más alto del podio en la Fórmula 1. El Gran Premio de Gran Bretaña fue el circuito para la historia, porque además, el siete veces campeón del mundo no sólo se impuso en la mejor carrera de la temporada, sino que se convirtió en el primer piloto en ganar nueve veces en un mismo trazado. Fue una fiesta increíble, por emoción, porque la lluvia le dio un toque especial, porque los fanáticos deliraron con su victoria y porque sus lágrimas reflejaron lo que significó este éxito del piloto británico con Mercedes.
Desde el 5 de diciembre de 2021 que el oriundo de Stevenage, de 39 años, esperaba volver a disfrutar de la miel del éxito. Y tuvo un sabor todavía más exquisito porque muchos aseguraban que no volvería a ganar. Pero no fue así: en Silverstone, Hamilton llegó a su triunfo número 104 en su trayectoria en la Fórmula 1. Por eso rompió en lágrimas y su voz se quebró al momento de los agradecimientos.
También resultó una buena carrera para Red Bull, porque el campeón del mundo, Max Verstappen, logró quedarse con la segunda plaza después de una prueba que tuvo una infinidad de emociones, estrategias y de apuestas por los compuestos. En la tercera ubicación entró Lando Norris, con McLaren.
Se dio una partida perfecta para Mercedes, que sostuvo las posiciones con George Russell en la primera plaza y detrás Lewis Hamilton, que intentó atacar a su compañero, pero no logró arrebatarle la posición. También tuvo un arranque ideal Verstappen, que partió desde el cuarto lugar pero supo dominar por la cuerda externa a Lando Norris y le quitó el tercer lugar.
En la vuelta 15, la pelea nuevamente se entabló entre Norris y Verstappen, porque el británico mantuvo un buen ritmo y, cuando tuvo una oportunidad, aprovechó el DRS y superó al campeón del mundo, que no pudo defenderse con su Red Bull.
En el giro 16 todo comenzó a cambiar, ya que la lluvia comenzó a caer sobre Silverstone.Toda la emoción se desató entre los giros 18, 19 y 20: Hamilton hizo explotar las tribunas cuando le birló el primer lugar a Russell, pero esa batalla la aprovecharon los McLaren, que salieron a cazar a los Mercedes y lo lograron. Primero Lando Norris fue al ataque y se trepó la primera posición. Y unos segundos después, Piastri fue por Russell (finalmente tuvo que abandonar por un desperfecto técnico) y Hamilton, que los superó después de un par de maniobras y así el 1-2 quedó en poder de los pilotos de McLaren.
En la vuelta 26, la lluvia comenzó a caer con más fuerza y las estrategias con los neumáticos empezaron a pesar. En tres giros se modificó todo el escenario de las primeras posiciones: Norris quedó primero cuando se detuvo Piastri, segundo se ubicó Hamilton y la paciencia de Red Bull le permitió a Verstappen subirse al tercer lugar.
Las estrategias de los neumáticos le terminaron de dar la derecha a Red Bull ya que apostó por el compuesto duro, mientras que McLaren y Mercedes por el blando. Sólo le dio resultado a Hamilton, que pudo sostener la primera posición, pero no a Norris, que cayó ante la presión de McLaren y perdió el segundo lugar del podio.
Fue un gran negocio para Red Bull este cierre de carrera, ya que sigue escalando en el campeonato y estiró la ventaja Max Verstappen acumula 237 unidades, mientras que el piloto de Mercedes tiene 156 puntos.
El final fue de película, porque todos los pilotos celebraron la coronación de Hamilton, que estaba completamente conmovido. En una carrera histórica, el hombre de Mercedes dio un golpe justo y más que merecido. La Fórmula 1 ofreció un show increíble y regaló la mejor carrera de la temporada.