José María López cumplió el domingo con una destacada labor en las 24 Horas de Le Mans. Con el Toyota GR 10 Hybrid, “Pechito” logró terminar segundo pese a los inconvenientes sufridos antes y durante la tradicional competencia francesa.
El cordobés, que compartió la conducción con Nick De Vries y Kamui Kobayashi, estuvo a cargo del último tramo y peleó por la punta. Incluso llegó a liderar y pudo completar ser escolta detrás de los ganadores Nicklas Nielsen, Miguel Molina y Antonio Fuoco, con la Ferrari 499P. En tanto que el otro coche de Maranello completó el podio, conducido por James Calado, Antonio Giovinazzi y Alessandro Pier Guidi.
El evento fue la cuarta fecha del Campeonato Mundial de Endurance (WEC por su sigla en inglés). Cabe recordar que “Pechito” y sus compañeros partieron en el 23º puesto y último de la clase Hypercar (la más importante), debido a que Kobayashi generó la bandera roja y neutralización en la clasificación. Luego, en el Warm Up del sábado por la mañana, a poco más de una hora para la largada, De Vries tocó a un auto de la clase GT3 y dañó la parte delantera del Sport Prototipo.
Ya en carrera, López y sus compañeros cumplieron una gran labor y fueron avanzando en el pelotón. Aprovecharon la lluvia que cayó en la noche para ya que debido a una buena detención en los boxes ganaron posiciones.
Cabe destacar que desde esta temporada el cordobés ya no integra el equipo de Hypercar de Toyota y corre en la clase LMGT3 con un Lexus que no tuvo buen rendimiento. Debido a las lesiones en un accidente en bicicleta de Mike Conway, López lo reemplazó en Le Mans.
En tanto que otro argentino cumplió con una gran faena. Se trata de Nicolás Varrone que también culminó la competencia y estuvo a cargo del Oreca 07 de la escudería AF Corse de la clase LMP2. El joven oriundo de Ingeniero Maschwitz compartió el volante con Ben Barnicoat y Francois Perrodo.