El neerlandés Max Verstappen (Red Bull) consiguió ayer su quinta victoria seguida en la Fórmula 1, al imponerse con contundencia en el Gran Premio de Austria, celebrado en el circuito Red Bull Ring.
El bicampeón titular y líder de la temporada partió desde la pole position y cruzó la meta al frente del pelotón, escoltado por el monegasco Charles Leclerc (Ferrari) y su compañero de escudería, el mexicano Sergio “Checo” Pérez.
En su propia casa, Red Bull recuperó los laureles que el año pasado le quitó Ferrari con el éxito de Leclerc e hilvanó el décimo triunfo consecutivo en la categoría reina, sumadas las nueve carreras de este año y la última de la temporada pasada.
Verstappen demostró durante todo el fin de semana que no tiene rivales en la actualidad, al ganar todas las instancias del GP de Austria, que obtuvo por cuarta vez en la historia. Con esa cantidad, se constituyó en el piloto más ganador de la historia de la carrera austríaca tras separarse del francés Alain Prost, coronado en tres oportunidades.
El neerlandés se encamina cómodamente hacia el tricampeonato de la F1 con una amplia ventaja de 81 puntos en la clasificación general respecto de “Checo” Pérez, quien ayer protagonizó una meritoria remontada tras partir del 15º lugar.
Una vez finalizada la prueba, las autoridades procedieron a recargar y sancionar al español Carlos Sainz (Ferrari) y al británico Lewis Hamilton (Mercedes), con 10 segundos de recargo, por “excederse los límites de pista”.
De esta manera, detrás de los componentes del podio se ubicaron el inglés Lando Norris (McLaren), el español Fernando Alonso (Aston Martin), el español Sainz (Ferrari), el británico George Russell (Mercedes), el también inglés Hamilton (Mercedes), el canadiense Lance Stroll (Aston Martin) y el francés Pierre Gasly (Alpine) para redondear los 10 primeros en las posiciones puntables.
La próxima carrera será el Gran Premio de Gran Bretaña a disputarse el domingo 9 en el circuito de Silverstone, donde Verstappen nunca pudo ganar.