El Tesoro Nacional comenzó a distribuir los $ 145.000 millones generados hasta ayer por el Aporte Solidario y Extraordinario para hacer frente a las urgencias sanitarias y económicas que impone la pandemia del Covid-19, informaron fuentes oficiales. Los fondos del Aporte fueron destinados a la compra de vacunas, medicamentos e insumos sanitarios, asistencia a las Pymes y los trabajadores, inversión en educación, mejoras habitacionales en barrios populares y el fomento de la inversión en el sector gasífero.
La primera distribución de fondos, cobrados al 27 de mayo a contribuyentes con patrimonios superiores a los $ 200 millones, ya se asignaron a políticas previstas en la Ley 27.605, que establece el destino de los recursos extraordinarios. Esos fondos deben destinarse a financiar la política sanitaria (20%); subsidiar a las Pymes para sostener los puestos de trabajo (20%); inyectar más recursos en las becas Progresar (20%), mejorar condiciones habitacionales de los barrios populares (15%) y apuntalar la inversión en el sector gasífero (25%).
Por su parte, el ministro de Economía, Martín Guzmán, sostuvo al respecto que el Aporte Solidario y Extraordinario tiene un gran valor para lidiar con los complejísimos desafíos que trae la pandemia. Nos ayuda a financiar políticas esenciales para sostener a nuestra sociedad de pie, de una forma progresiva y que ayuda a la estabilidad macroeconómica”.
A fines del mes pasado, la Afip habilitó la posibilidad de realizar ejecuciones fiscales y solicitar medidas cautelares sobre las personas alcanzadas por el Aporte Solidario y Extraordinario que no cumplieron con sus obligaciones. En este sentido, el organismo señaló que inició más de 2.500 fiscalizaciones. Por último, aquellos contribuyentes que adeuden el pago, podrán regularizar su situación a través de planes de pagos que estarán vigentes hasta el 30 de septiembre.