El consumo masivo registró en septiembre una caída interanual del 4,4%, impulsada por el descenso en las ventas de supermercados de cadena (-4,4%) y la contracción en farmacias (-1,8%), según un informe de la consultora especializada Scentia. En la comparación mensual, la retracción fue del 3,7% frente a agosto, con una fuerte incidencia del retroceso en supermercados, del orden del 5,9%.
A pesar de esta tendencia negativa, el acumulado de los primeros nueve meses del año mostró un crecimiento del 1,8% respecto del mismo período de 2024, reflejando cierta estabilidad en el balance general. El relevamiento destacó, además, que el e-commerce continúa siendo el segmento más dinámico del mercado, con un incremento interanual del 14,7% y una suba mensual del 1,1%. También crecieron los autoservicios independientes (8,6%) y el canal mayorista (8,5%), evidenciando un cambio en los hábitos de compra de los consumidores.
Caída del consumo minorista
En paralelo, las ventas minoristas pymes experimentaron en septiembre una baja interanual del 4,2% a precios constantes, según la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME). En la comparación mensual desestacionalizada, la caída fue del 2%, mientras que el acumulado anual aún muestra una mejora del 5% interanual.
Todos los rubros relevados tuvieron descensos interanuales, con Textil e indumentaria (-10,9%) y Bazar, decoración, textiles para el hogar y muebles (-6,2%) como los más afectados. Solo Perfumería logró un repunte mensual del 1,4%, mientras que Ferretería y materiales eléctricos mantuvieron niveles estables.
En síntesis, septiembre cerró con un retroceso generalizado del consumo, condicionado por la pérdida de poder adquisitivo, el endeudamiento de los hogares y la falta de incentivos comerciales, en un contexto de incertidumbre económica y política.