El Ministerio de Economía anunció una ampliación de la oferta con títulos ajustados por inflación para el sorpresivo canje de deuda anunciado para este martes, en el que buscará postergar el pago de letras del Tesoro que vencen a lo largo del primer trimestre.
El Palacio de Hacienda incorporó la Letra del Tesoro Nacional ajustable por inflación (LECER) con vencimiento en junio, que se podrá canjear por otras dos Lecer que vencen en enero y febrero.
De ese modo, la Secretaría de Finanzas volvió a incluir entre sus ofertas títulos indexados por la evolución de los precios, una opción que había dejado de lado hace varios meses, tratando de volcarse a los títulos de tasa fija.
El Ministerio de Economía sorprendió la semana pasada al anunciar el lanzamiento de un nuevo canje de deuda para este martes.
En principio, procuraba cambiar 8 títulos que vencen en los primeros meses de este año, por dos canastas de letras que incluyen bonos a descuento y bonos duales, y que tendría una base asegurada de casi el 45% de participación.
Este mes, el Tesoro tiene que enfrentar vencimientos de deuda en pesos por $1,1 billones de los cuales $800.000 están en manos del sector privado. Los bonos a canjear vencen en el primer trimestre e incluyen LECER, LEDEs, BONCE y BOTEs.
La primera canasta incluye un 25% de la LEDE a abril, 35% de la LEDE a mayo y 40% de una nueva LEDE a junio.
La otra canasta está compuesta por 35% Dual a julio, 35% de Dual a septiembre y 30% de Dual a febrero 2024.
De acuerdo con Portfolio Personal Inversión (PPI) el gobierno enfrenta este año «un escenario muy preocupante si no se logra estirar la duración en los próximos meses».
Ahora, con la reincorporación al menú de opciones de bonos ajustables por la evolución de los precios, uno de los más demandados por el mercado en un contexto de alta inflación, procura mejorar las perspectivas de la operación.
En el mercado se supone que los organismos del Estado tienen un 45% de las tenencias de los bonos que vencen y que por ello, ese sería el piso del canje, por lo que se esperaba que hubiera una participación de privados de entre el 15% y el 20%.
La inclusión de la Lecer podría mejorar la perspectiva del canje y elevar la participación privada.
Un elemento a tener en cuenta es que como producto de las licitaciones de diciembre el Gobierno consiguió un financiamiento neto de $700.000 millones, con lo cual, parte de los vencimientos de enero ya estarían cubiertos.