La SexpoErótica es un evento que reúne características y dimensiones particulares, en diferentes formas. Se trata del primer festival de sexo y erotismo del país y a la vez, uno de los más grandes de Latinoamérica. En esta ocasión, el show que se celebrará el próximo sábado 13 de abril, desde las 20, en el Espacio Quality (Cruz Roja Argentina 200), alcanzará su decimonovena edición.
“Festival de placeres”, “Festejemos la diversidad», “La diferencia de ser auténticos”, son algunos de los colores camaleónicos que ha adoptado el paisaje afrodisíaco que se realiza año a año, desde 2005, en Córdoba. Esta edición contará con cinco escenarios extendidos a lo largo del recinto y más de 250 artistas, de Córdoba, Rosario y Buenos Aires. Entre sus atracciones se desplegará una oferta que reúne performances eróticas sobre el agua; charlas temáticas; espacios de realidad virtual; mesas de citas rápidas; una zona de BDSM (Bondage; Disciplina y Dominación; Sumisión y Sadismo; y Masoquismo); laberintos eróticos y más. Aparte como atracciones especiales de esta celebración se encuentra el espectáculo “Sexo a gusto” de Carla Dogliani, “La Bicho”, y la doctora Bazán Quiroga, el show de la humorista Sole Macchi y la obra erótica “Sex” de José María Muscari.
La gente de la Sexpo
Cristian Sassi es la cabeza del encuentro que califica como “una locura”. La Sexpo se presenta como un rostro de Jano, dividido entre lo prohibido y la endeble barrera de lo tolerable. “El trasfondo de todo esto es despertar el erotismo y que toda la gente pueda ser libre al respecto”, sintetiza Sassi. Para esta velada, comenta que esperan unos 6000 o 7000 asistentes. Es que los espectadores, en toda su diversidad, son uno de los puntos fuertes de la noche. “Esto es una fiesta donde el público también es el principal protagonista”, asegura el productor. En ese sentido, se puede afirmar que quienes asisten a la Sexpo no son siempre las mismas personas. “En su comienzo, sin darnos cuenta -reconoce- la feria estaba apuntada de otra forma, hacia un público más heterosexual masculino”. Con el correr de los años el público adoptó otra forma y estilo. Cristian agrega que hoy el festival recibe un público mayormente femenino y LGBT. Además, explica que desde su punto de vista esta transformación se debe a la “evolución de la diversidad y el protagonismo de la mujer” en el ámbito de lo sexual. “20 años atrás tenía un tipo de rol en las relaciones y hoy es otro. Finalmente, concluye que el público cambió sexualmente y de esa forma la audiencia de la feria.
Alejado de la perspectiva pecaminosa, la propuesta del festival está destinada a personas solteras, en pareja, solos y solas o gente en grupo. En el boulevard erótico se encuentran los stands con juguetes sexuales y otros aditivos para el placer solitario o en conjunto. En relación a las diferentes áreas, Cristian destaca la importancia del espacio BDSM: “Funciona mucho porque la gente tiene bastante curiosidad”. El horario en que se celebra el evento (de 20 a 05) contribuye a la concurrencia de los shows y a las distintas actividades que contempla la feria. Sassi explica en detalle que el público está en permanente rotación: “Desde las 20 hasta las 00 o 01 llega gente de 35 años en adelante. Vienen, van a una charla, comen algo, asisten a algún tipo de show, escuchan a los humoristas, se ríen un rato y después se va a las 12.30 o 01 con su pareja…” Posteriormente, la noche se torna más juvenil. “Se abre una pista de baile, por lo que vienen más a la fiesta, charlar con amigos y divertirse en los juegos”.
Curiosidad
Cristian revela que en el evento impera la gente en pareja: “Usan a la expo como una salida diferente para despertar un poco el interés y alejarse de lo convencional de la rutina”. Constantemente el organizador aclara que allí, en su producto, no se puede ver nada que no se encuentre en internet, a un solo clic de distancia. Sin embargo, admite que la noche toma otra forma y se “va calentando un poco la situación”. Para las personas solteras hay un espacio especial. “Ofrecemos la cita rápida o “speed dates” porque la gente que no está en grupo o está soltera suele tener ganas de conocer a alguien”. Añade que la movilización apunta hacia el despertar del erotismo y que sirva como una oportunidad para socializar.
Tiempo de cambios
Dos años atrás el nombre del evento era “Festejemos la diversidad”. La diversidad vista no desde el punto de vista sólo del género sino en relación a los cuerpos. Según expone Sassi, antes la visión era que “para los shows tenían que ser todos cuerpos perfectos o hegemónicos”. Resalta que en la producción varían acorde a los pedidos del público. Los espectadores quieren ver a la gente “más común” dando vueltas por el festival.
Organizar en la incertidumbre
La preparación del evento comenzó en noviembre. Tiempos de tribulación, momentos electorales y procesos inflacionarios invaden la producción de la Sexpo. “Lo que estamos viendo en el país nos perjudica porque no sabemos cuándo se puede llegar a hacer, por lo que vamos proyectando ideas en base a lo que tenemos al alcance, pero tampoco estamos tan seguros de poder concretar muchas cosas. Algunas cosas se nos presentan como desafíos”, relata. De la misma forma describe que la gente está con la cabeza en otro lado y concluye: “Es difícil con todos los problemas que estamos teniendo, conectarse un poco con el deseo”.
Inicios
Tras graduarse como realizador visual, Cristian Sassi comenzó una pequeña carrera en el ámbito de la filmación de eventos. La lente de su cámara apuntaba hacia casamientos y cumpleaños de 15. Lejos de cumplir sus expectativas y con un desconocimiento del ambiento, Cristian junto a un amigo, se aventuraron en la filmación de contenido XXX. En los albores de los años 2000 filmaron una tetralogía de películas para adultos, que más tarde serían conocidas como las primeras obras porno filmadas en Córdoba por actores locales. La fama no tardó en llegar, por lo que luego emprendería con la realización de la feria erótica. “Cuando inicié no proyectaba tantos años vigentes de la Sexpo ni su repercusión. Cuando mejor pensé que me iba a ir –en la edición número 10- terminó siendo lo peor que me pasó en la vida. Tuve que salir a vender un terreno que tenía para pagar deudas…” Una sorpresa que no le hizo bajar los brazos.
Críticas
¿Cómo puede ser que te alboroten mis placeres? recita un tema de Los Redondos. La Sexpo vio luz en 2005, no sin despertar polémicas. “Me acuerdo que cuando estaba por concretarla, era amigo del publicista Orestes Lucero. Y en ese momento él me dijo que la expo iba a ser una bomba. Y que si lográbamos generar un caos, mejor era para nosotros. Yo lo que menos quería era generar un caos. Yo solo quería que funcione mi producto, desde la inocencia, no como algo caótico. Mucha gente nos señalaba y decía que esto era una locura”, rememora Cristian. “Mi idea era realizar un evento “prohibido” y hacerlo público. Prohibido en el sentido de que hablábamos de erotismo, y de sexo. En esa época tenías los videoclubes y las películas condicionadas estaban escondidas. Alquilar una película porno era prácticamente un delito”, manifiesta. Evolución, deconstrucción, climas de época. Son todas rutas que conducen al mismo lugar. “Hoy en día que alguien lea algo sobre la Sexpo y lo tome con naturalidad es una gran locura”, sostiene el exdirector de películas condicionadas.
Expansión
Sassi enfatiza alegremente que la SexpoErótica, bajo este formato, es una feria única en Latinoamérica. “En un momento estuvimos cerca de llevarla a México. Vino la pandemia y se cortó todo”, recuerda. En junio, el evento viajará hacia Mendoza, plaza que visitó en una única oportunidad, en 2018. El segundo capítulo de este ciclo tendrá lugar en la docta, durante el mes de septiembre. No obstante, la frutilla del postre y su “gran sueño” es llegar a Buenos Aires con la sexpo. “Estamos tratando de cerrarlo”, indica.
Logro
“El gran éxito de la Sexpo es lograr que hoy en día, en la feria, podamos convivir todas las comunidades y divertirnos con un mismo punto en común: nos gusta el erotismo, el deseo y la fantasía”, concluye Cristian.
Las entradas generales se consiguen por $ 5.000, en tanto que el sector V.I.P tiene un costo de $ 15.000. Se consiguen a través de la plataforma ticketek.com.ar.