Olivia Hussey y Leonard Whiting, protagonistas de la versión de 1968 de «Romeo y Julieta» dirigida por Franco Zeffirelli, presentaron una demanda a los estudios Paramount por explotación sexual y distribución de imágenes de niños adolescentes desnudos, a raíz de las controvertidas escenas que debieron filmar para esa producción cuando apenas tenían 15 y 16 años respectivamente.
La demanda radicada en Santa Mónica argumenta que el director de la cinta, fallecido en 2019, les había asegurado previamente que no habría desnudos en una controvertida escena en un dormitorio, pero que una vez en el set de filmación los convenció de quitarse la ropa para esos cuadros.
Zeffirelli les había dicho a los protagonistas que usarían una malla color carne, pero luego cambió de planes y para convencerlos les mostró donde ubicaría las cámaras y se comprometió a no filmar sus partes íntimas, según narró a medios de Hollywood Tony Marinozzi, representante de Hussey y Whiting. Sin embargo, en la escena final se pueden ver las nalgas del actor que encarnó a Romeo y los senos de la joven Julieta.
«Lo que les dijeron y lo que sucedió fueron dos cosas diferentes. Confiaron en Franco. A los 16 años, como actores, tomaron su iniciativa de que no violaría esa confianza que tenían. Franco era su amigo y, francamente, a los 16, ¿qué hacen? No hay opciones. No hubo #MeToo», señaló el representante.
La demanda alega que los protagonistas sufrieron angustia mental y emocional en los 55 años que transcurrieron desde el estreno del filme y que por esa escena perdieron oportunidades laborales.
Ante la prensa, el abogado de los actores, Solomon Gresen, puntualizó que «las imágenes de desnudos de menores son ilegales y no deben exhibirse».
«Estos eran niños muy pequeños e ingenuos en los años 60 que no entendían lo que estaba a punto de golpearlos. De repente, se hicieron famosos a un nivel que nunca esperaron y, además, fueron violados de una manera que no sabían cómo manejar».
Ocurre que la película tuvo un alto impacto al momento de su estreno y se hizo con varias nominaciones a los premios Oscar.
Curiosamente, en 2018, Olivia Hussey había defendido la escena del desnudo en una entrevista al sitio Variety al señalar que «era necesario para la película» y había destacado el «buen gusto» de Zeffirelli en los cortes finales.
La denuncia a 55 años de ocurrido los hechos fue posible por la ley aplicada en California que suspendía temporalmente los límites temporarios para acusaciones de este tipo.