Se acerca el invierno y para quienes transitan las calles de Córdoba se vuelve necesaria una parada en una cafetería para disfrutar de un buen desayuno o merienda que caliente el cuerpo.
Los tradicionales bares cordobeses que tienen una larga historia detrás, siguen siendo los más elegidos por su reconocimiento y trayectoria. Por eso, a unos días de que comience el invierno, te compartimos cinco confiterías para que frenes tu agenda y te tomes un descanso.
Real
Este tradicional bar cordobés se encuentra ubicado entre la zona de Mercado y el antiguo teatro Comedia esta; una confitería que fue testigo de historias, encuentros, momentos y amistad y que ya cuenta con más de 50 años de trayectoria.
Ubicado en la Av. Olmos este bar llegó en la década de 1960 y floreció con el auge del Teatro, el movimiento de los bancos, del Mercado, de las peatonales y de las oficinas de la zona.
La Real es una tradicional confitería en donde se respira un aire “fuera del tiempo” y donde es posible disfrutar de un buen café entre paredes que recuerdan épocas de teatro y movimientos políticos. Su privilegiada ubicación en pleno centro, rodeado de edificiones conocidos y movimiento de transeúntes lo convierten en un bar clásico, sin discusión.
La Real está abierta todos los días, en una invitación a turistas, vecinos y paseantes a disfrutar un momento de detención y café.
Bar Monserrat
Empapado por la gran carga histórica de la manzana que lo alberga, este bar es pura tradición en Córdoba. Ubicado enfrente del Colegio Nacional Monserrat y rodeado por las anécdotas de la manzana histórica se encuentra el Bar Monserrat.
Por allí pasaron grandes figuras de la política nacional, presidentes como Raúl Alfonsín, Carlos Menem y Fernando De la Rúa, siendo éstos dos últimos estudiantes de la Facultad de Abogacía de la UNC que está a solo unos metros.
El Bar Monserrat es escala clásica de estudiantes tanto de la UNC como del colegio, trabajadores de locales de la zona y vecinos que visitan el centro de la ciudad.
Venezia
Si hay una esquina con sabor a clásico en Barrio General Paz, ese lugar es seguro La Venezia: bar y heladería con un siglo de tradición en la ciudad.
Ubicado en la esquina que une Lima con la calle Viamonte este local estuvo cerrado apenas un tiempo, reabrió sus puertas para ofrecer lo mejor de sus cafés y helado caseros.
La Venezia es color y sabor de tradición; helados caseros con recetas de la familia y un espacio que recuerda los encuentros de barrio, las salidas en bicicleta con amigos y el lento movimiento de los barrios pueblo.
Por el local han pasado celebridades y figuras conocidas de la música, el humor y la política, como típico bar de barrio allí conviven vecinos, miradas y se intercambia la información del día entre un café y otro.
Bar de la Plazoleta
Este bar tradicional festejó sus 35 años en 2022. Ubicado en un esquina única de la ciudad, el Bar Plazoleta es un lugar ideal para sentarse y disfrutar de un café al aire libre con una panorámica del centro de la ciudad y todo su movimiento.
La ubicación permite desde un vistazo observar la zona céntrica, algunos edificios históricos, y el movimiento constante de vecinos y estudiantes que circulan por la zona.
La esencia del bar está ligada a escenarios de gran movimiento político, eventos especiales, pasión futbolera y más; es que la encrucijada de avenidas centrales lo convierte en un punto clave de la ciudad.
Es por eso que La Plazoleta es testigo de festejos, marchas y actos políticos, festejos, la salida de los espectáculos del teatro del Libertador San Martín, las reuniones de jóvenes y adolescentes en la puerta del Patio Olmos y mucho más.
La Plazoleta ya es un clásico y como tal ofrece a sus clientes una carta de menús con tradición.
Bar 1928
Con el Mercado Norte de la ciudad como telón de fondo este histórico bar es parte del movimiento diario de los vecinos que circulan para realizar sus compras.
1928 es un bar clásico anclado en plena zona comercial que cuenta con más de 40 años desde que abrió sus puertas por primera vez. El local fue remodelado luego de que en 2017 sufriera un situación eléctrica que obligara a modificar su apariencia más clásica y de antaño.
Pero nada de esto influyó en su carácter de clásico indiscutible. La zona del mercado y sus alrededores lo dotan del color y la tradición.
Platos abundantes y tradicionales, recetas caseras y café son las marcas que le vuelven un clásico de la zona.