La popular actriz, vedette y comediante Iliana Calabró, una de las figuras centrales de la obra «Sex Recargado» que se presenta en Villa Carlos Paz durante esta temporada de verano, reconoció que luego de la pandemia «costó mucho volver a acercar la gente al teatro» y afirmó que se considera una «investigadora del entretenimiento».
«Soy una investigadora del entretenimiento, me interesa todo aquello que a la gente la pueda entretener; eso me hace bien, pensar siempre en positivo, en cosas divertidas, en disfrutar como la gente se divierte», planteó la mediática.
«Sex Recargado» es una de las tres versiones simultáneas que pueden verse este verano de la obra creada por el dramaturgo José María Muscari que aborda sin tapujo temas como el sexo y el goce -ya que además de sostener su presencia porteña, un tercer elenco también está en Mar del Plata y otras localidades de la Costa-. Con funciones de martes a domingos en el Teatro Melos de la ciudad serrana cordobesa, acompañan a Calabró figuras como Juan Palomino, Andrea Ghidone, Gabo Usandivaras, Barby Silenzi, Nacho Sureda, Charo Bogarín, Flor Marcasoli y Gustavo Remesar (ganador de «Soñando por Cantar»).
«Se trata de una experiencia que se vive distinta dependiendo de con quien estés acompañado», relató la hija del recordado Juan Carlos Calabró, quien aseguró que sabe de algunos espectadores que volvieron a ver la obra hasta tres veces.
Es la primera vez que Iliana es dirigida por José María Muscari, algo que admitió que sentía «como una asignatura pendiente» y que por eso aceptó la propuesta a pesar de que también había recibido otros ofrecimientos para la temporada en las distintas plazas.
«Estoy muy contenta», confió la animadora, sobre un desafío que la «vuelve a encontrar frente al público adulto después de un recorrido muy largo en la comedia familiar»: «Y es un reencuentro en donde hay una interacción de disciplinas que también me implica volver a bailar, al exhibicionismo de alguna manera, a un cambio que se ha dado en la sociedad y enfrentar este producto que guarda un mensaje integrador», añadió.
«Para estar en ‘Sex’ creo que tenés que estar muy convencida, estar muy focalizada, porque el trabajo no termina en ese rato arriba del escenario, como en una comedia», sostuvo en relación a lo que la pieza pide de sus integrantes: «Tenés que entrenar, estar a la altura de esto que implica una entrega física, de un armado previo».
Calabró apuntó que la obra es «una experiencia que te permite esta interacción de disciplinas, poder llevar adelante un monólogo y diálogo con el público» en la que «la mujer tiene bastante protagonismo»: «Las participaciones son involucrando o focalizadas en la mujer, y creo que no es casual, tiene que ver con este cambio que ha sufrido la sociedad, que si bien fue paulatino se ha intensificado en los últimos tiempos, y esto está en este planteo integrador».
«La no discriminación -opinó la artista- es de alguna manera uno de los bastiones del mensaje, me parece que no es casual que Muscari me haya buscado para llevar este rol, el rol conductor desde lo femenino, en el que tengo como compañero a Juan Palomino. También está esta deconstrucción de la masculinidad como ‘machirula’ de la cual veníamos y cómo se ha recompuesto la sociedad desde el mismo rol pero desde otro lugar. Es sutil pero constante este mensaje, casi subliminal diría».
«El público lo celebra, y te das cuenta porque sale descargado, se siente identificado y el espectáculo está armado de tal manera que todo el mundo encuentre identificación. Sea desde el género, desde su elección», completó.
A modo de evaluación de lo que es la actual temporada teatral luego de los difíciles años de pandemia de coronavirus, Iliana comentó que había sido complejo «volver a acercar a la gente al teatro»: «Incluso algunos vienen con su barbijo, gente que tomó ese hábito, no lo perdió y es respetable, entonces también te condiciona porque pensás que puede ser alguien que está disminuido en sus defensas. Todos cambiamos con la pandemia, nadie es el mismo que antes, quizás no nos damos cuenta. Desde el cuidado en la higiene personal, a esto de que uno se autoimpone ciertas distancias; a mí me gusta saludar a la gente a la salida del teatro».
Para lo que viene en el año al término de la temporada, Calabró manifestó que le había planteado a su representante «que no estaría mal» sumarse a «algún proyecto televisivo»: «No lo descarto, a veces la gente dice ‘ay, ¿pero qué pasa que no la vemos en televisión?’, y es que no me convocan», se lamentó.
«En este vértigo que uno vive, te ofrecen un trabajo para empezar mañana, pero uno dice ‘uy, me tomo las vacaciones y si le digo que no, ¿vendrá otro trabajo?’, es esa incertidumbre que lamentablemente en nuestro país nadie se puede relajar», señaló Calabró, y recordó que en su caso la pandemia fue «muy generosa» porque fue convocada para participar de los ciclos «Divina comida» y «Masterchef Celebrity», ambos por Telefe.
Bajo su mirada, es importante tener exposición en la pantalla chica para tener llegada y reconocimiento de un público más amplio, aunque no elegiría cualquier clase de proyecto. Consultada sobre si le gustaría incursionar en el periodismo político y de actualidad como su hermana Marina, Iliana descartó de plano la idea: «No, eso nunca nunca, si hay algo en que no me detengo es en eso, en la situación política. Le presto atención en función de que estoy comprometida con la realidad de mi país, y me preocupa. Pero tanta preocupación no me hace bien para mi trabajo, yo tengo que estar lo más contenta posible para transmitir alegría, soy una investigadora del entretenimiento», repitió, para cerrar el extenso diálogo desde la casa en la que se hospeda en la villa serrana.