Un estudio de investigación que realizaron los astrofísicos Jon Hakkila del Colegio de Charleston y Robert Nemiroff de la Universidad Tecnológica de Michigan, que se publicó en The Atsrophysical Journal reveló el particular fenómeno de las explosiones cósmicas.
La conclusión fue que estas últimas crean estallidos de rayos gamma que pueden ser más veloces que la luz en las nubes de gas circundantes, pero lo efectúan sin alterar la teoría de la relatividad de Einstein. Por su parte, el grupo a cargo del estudio, propuso que tales chorros superluminales podrían engendrar la reversibilidad en el tiempo que se observa en las curvas de luz de explosión de rayos gamma. La acción ejecutada no viola la teoría del físico alemán puesto que los chorros propuestos se mueven más rápido que el destello a través de la detonación generada por la explosión, no más veloz que la luminiscencia a través del vacío.
En un comunicado, Hakkila expresó que una manera de visualizar este movimiento es mediante la imaginación de alguien a un lado de un estanque haciendo saltar una piedra a través del agua en su dirección. La piedra que salta se moverá a través del aire entre brincos más rápido que las olas que genera por medio del agua. De esta manera, el científico sostuvo que se verán ondas creadas por cada rebote de la piedra que se aproxima en orden inverso, con ondulaciones más reciente llegando primero y las del salto inicial arribando al final.
Por otro lado, la explicación de explosión superluminal conserva múltiples características de los modelos aceptados de chorro de rayos gama, subrayó Hakkila. Por su parte, Nemiroff agregó que su escenario propuesto involucra la radiación de Cherenkov, un tipo de luz creada por el desplazamiento superluminal que antes no se consideraba fundamental para producir las curvas de luz de los estallidos de rayos gamma.