GINEBRA.- Mientras la Organización Mundial de la Salud (OMS) salió a ofrecer ayer otra estimación escalofriante respecto a la pandemia del coronavirus, al sostener que el 10% de la población mundial ya pudo haber tenido la enfermedad, la comunidad científica alerta por otro de los grandes fantasmas que guardaba la enfermedad: su transmisión a través del aire.
En efecto, un grupo de científicos y médicos publicó una carta en la revista Science donde resaltó la importancia de tomar medidas para combatir los contagios por vía aérea, ante la creciente evidencia de que, bajo ciertas condiciones, las personas pueden infectarse por pequeñas gotas y partículas que flotan en el aire durante minutos, incluso horas, que juegan un papel central en la pandemia.
Existe una evidencia abrumadora de que la inhalación de Sars-CoV-2 representa una ruta de transmisión importante para el Covid-19”, escriben los autores de la carta, liderados por Kimberly Prather, de la Universidad de California en San Diego. Según explican en el artículo, las personas con Covid, también las que no tienen síntomas, liberan miles de partículas cargadas del virus a través de gotitas, al respirar, toser, hablar o cantar. Por lo tanto, es mucho más probable que uno inhale ‘aerosoles’ que una gota, por lo que la atención debe centrarse en la protección contra la transmisión aérea”, aseguran en el texto, donde reclaman a las autoridades añadir instrucciones claras sobre la importancia de trasladar las actividades al aire libre, mejorar el aire interior mediante ventilación y filtración (…) y usar mascarillas en todo momento cuando haya otras personas presentes”.
Sin hablar de aerosoles, concepto que hace referencia a pequeñas gotas que pueden permanecer en el aire y viajar una distancia significativa, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos también advirtieron ayer que existe evidencia de que bajo ciertas condiciones, las personas con Covid-19 parecen haber infectado a otras que estaban a más de dos metros de distancia”.
Todo ocurre mientras el director de emergencias sanitarias de la OMS, Mike Ryan, alertó ayer que un 10% de la población mundial ya puede haberse contagiado de la enfermedad, lo que significa más de 700 millones de personas, frente a los 35 millones de casos confirmados desde enero pasado. Con contundencia, Ryan destacó que estas cifras indican que la gran mayoría del mundo sigue bajo amenaza” del virus.