En efecto, el presidente del Serum Institute de India (SII) -el mayor fabricante de vacunas del mundo-, Adar Poonawalla, dijo que administrar una tercera dosis contra el Covid-19 es contrario a la ética” cuando muchos países en desarrollo continúan intentando inmunizar con las primeras dosis.
La medida no es justa” mientras haya países pobres que no recibieron vacunas porque los ricos se apoderaron de la mayoría de las disponibles”, repudió Poonawalla. Además, el grupo de expertos que asesora a la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de Estados Unidos recomendó aprobar la tercera dosis sólo para mayores de 65 años y para quienes corren riesgo de desarrollar la enfermedad con alguna gravedad, pero no para el resto de los ciudadanos, como propuso el presidente Joe Biden.
Muchos de los expertos, que son independientes de la FDA, alertaron también por el riesgo de miocarditis que significa la tercera dosis para los varones más jóvenes; aunque el principal asesor de la Casa Blanca, el virólogo Anthony Fauci, dijo que el dictamen del organismo no es el final de la historia”. No creo que hayan cometido un error.
Pero la gente debe entender que las informaciones y los datos siguen llegando, todos los días y todas las semanas. (La FDA) continuará observándolos en tiempo real”, declaró Fauci. Italia, por lo pronto, comenzó a aplicar ayer la tercera dosis de las vacunas de Pfizer o Moderna a las personas inmunodeprimidas, a las trasplantadas y a pacientes oncológicos.