Los mexicanos votaban ayer, en el primer referendo revocatorio de la historia del país, la continuidad o no en su cargo del presidente Andrés López Obrador a la mitad de su mandato, en una elección en la que se anticipaba un espaldarazo al mandatario.
“Que nadie olvide que el pueblo es el que manda, el pueblo pone y el pueblo quita”, dijo López Obrador ante la prensa tras votar en el Museo de Arte de la Secretaría de Hacienda, a unos pasos del palacio presidencial. AMLO logró que la consulta fuera incluida en la Constitución en 2019 como un antídoto contra “malos gobiernos”.
“Nos va a ayudar a que nadie en ningún nivel en la escala se sienta absoluto”, añadió el gobernante, elegido por seis años. La consulta fue impulsada por el propio López Obrador, que en las encuestas tiene 60% de imagen positiva.