El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y su homólogo ruso, Vladimir Putin, mantendrán esta tarde una conversación telefónica de cara a las reuniones que tendrán lugar la segunda semana de enero, entre estos países y los miembros de la Otan, con motivo de la fuerte presión militar en la frontera que Rusia comparte con el país del este europeo, Ucrania. Según la Casa Blanca, el pedido de la reunión habría sido realizado por Putin, a lo que Biden aceptó ya que “cuando se trata de Rusia no hay sustituto para el diálogo directo líder-líder”.
Se “discutirán una serie de temas, incluyendo los próximos compromisos diplomáticos con Rusia”, aseguró la portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, Emily Horne, a través de un comunicado publicado ayer en el que, además, aseguró que Estados Unidos debatirá todos los temas tratados con sus aliados a fines de encontrar una solución en conjunto. “La administración Biden sigue llevando a cabo una amplia labor diplomática con nuestros aliados y socios europeos, consultando y coordinando un enfoque común en respuesta a la concentración militar de Rusia en la frontera”, se detalló en el escrito.
En este sentido, el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, se comunicó con el presidente ucraniano, Volodímir Zelensky, para reiterarle su apoyo “inquebrantable” y discutir sobre los esfuerzos de los países para “resolver pacíficamente el conflicto en el este de Ucrania”.
La conversación telefónica entre Biden y Putin es el primer contacto directo de los mandatarios luego de la videoconferencia que mantuvieron hace más de veinte días, donde Biden le habría advertido a Rusia las “graves consecuencias” que habría para su país en caso de invadir Ucrania. Por su parte, desde el Kremlin negaron la intención de realizar una invasión y acusaron a Estados Unidos y la Otan de ser los culpables del incremento de la tensión militar en la zona fronteriza.
Días más tarde Putin presentó un escrito para discutir un acuerdo entre los países involucrados que de “garantías de seguridad” a las partes y exigió que sea tratado con celeridad. Entre los pedidos que Rusia lleva adelante, uno de los más importantes sería impedir que la Otan acepte como miembros a Ucrania y Georgia, algo que no fue visto con buenos ojos por parte de Jens Stoltenberg, secretario general esta organización.
Borrel consideró “un absurdo” excluir a la Unión Europea
Ante el conflicto militar en la frontera entre Rusia y Ucrania, y el gran protagonismo de Estados Unidos frente a las negociaciones con la ex Urss, el Alto Representante de la Unión Europea para Política Exterior y Seguridad Común, Josep Borrell, dijo en una entrevista periodística que la Unión Europea (UE) “no debe ser un espectador no involucrado” y agregó que “si Moscú quiere hablar sobre la arquitectura de seguridad en Europa y sobre garantías de seguridad a partir de enero, como se ha anunciado, no es sólo un asunto de Estados Unidos y Rusia.
La UE debe estar presente en estas negociaciones, que sólo tienen sentido si tienen lugar en coordinación cercana y con la participación de la UE”. Además, consideró que el esquema de negociaciones entre EE.UU. y Rusia remite a un momento de “posguerra” que no es el actual, por lo que manifestó que negociar sobre la seguridad de Europa sin implicar a la UE “es un absurdo”.