El papa pidió que no se use el trigo como arma de guerra

El bloqueo de las exportaciones de este cereal se ha convertido en una gran problemática que podría desatar consecuencias fatales, vinculadas al hambre mundial.

El papa pidió que no se use el trigo como arma de guerra

El papa Francisco pidió este miércoles que se resuelva el bloqueo de las exportaciones del trigo de Ucrania, uno de los mayores productores del mundo de este alimento básico, con el fin de que se garantice el derecho humano universal a la alimentación.

En la audiencia general el miércoles, el Sumo Pontífice formuló su exhortación habida cuenta del bloqueo por parte de Rusia y señaló que esa circunstancia representa una amenaza de hambruna en muchas partes del mundo.

«Es muy preocupante el bloqueo de las exportaciones de trigo de Ucrania, de las que depende la vida de millones de personas, especialmente de los países más pobres. Dirijo un apremiante llamamiento para que se hagan todo esfuerzo para resolver esta cuestión y para garantizar el derecho humano universal a la alimentación. ¡Por favor, que no se use el trigo, alimento básico, como arma de guerra!», pidió el Pontífice.

Anteriormente, los líderes de los países de la Unión Europea condenaron a Rusia por provocar un peligro alimentario mundial e instaron al Kremlin a poner fin de inmediato al bloqueo de las rutas de transporte de Ucrania, lo que impide exportar cereales de Ucrania a los mercados mundiales.

Incluso el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, fue más allá cuando denunció que los invasores habían robado al menos medio millón de toneladas de cereales del territorio temporalmente ocupado de Ucrania y estaban buscando formas de venderlos ilegalmente.

Debido al bloqueo ruso de los puertos marítimos de Ucrania, siete millones de toneladas de trigo, 14 millones de toneladas de grano de maíz, tres millones de toneladas de aceite de girasol, tres millones de toneladas de harina de girasol y otros cultivos no ingresaron al mercado mundial.

Eso llevó a un aumento récord en los precios del mercado mundial e inevitablemente tendrá como resultado una crisis alimentaria mundial y una inflación creciente, señala el sitio Ukrinform.

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