El rey Felipe VI de España inauguró ayer el periodo de sesiones legislativas con un llamado a la unidad, en medio de creciente polarización política agravada por la reciente reelección del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en alianza con independentistas catalanes.
El rey felicitó tanto al líder socialista por su reelección como a sus ministros en el arranque de su discurso en el Congreso, del que se ausentaron los representantes de los partidos independentistas catalanes que apoyan al Gobierno.
“La obligación de todas las instituciones es legar a los españoles más jóvenes una España sólida y unida, sin divisiones ni enfrentamientos”, dijo el Felipe VI. “Desde hace siglos España ha sido una realidad compartida y edificada por mujeres y hombres de diversa procedencia social o geográfica con ideologías distintas” pero con la idea compartida de “un mejor país para todos”, agregó.
Felipe VI dijo que la convivencia debe darse en el “marco democrático” de la Constitución que se dio España en 1978 para su transición tras la dictadura de Francisco Franco (1936-1975), cuando se restablecieron la democracia y la monarquía parlamentaria.