El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, prefirió no salir del país a medida que continúan las investigaciones por los actos golpistas del 8 de enero y envió al Foro Económico de Davos, en Suiza, a los ministros de Economía, Fernando Haddad, y de Medio Ambiente, Marina Silva.
En tanto, el Ministerio de Hacienda señaló que tras los hechos violentos en Brasilia, se generó un mayor interés por la presencia del gigante sudamericano en este foro, en el que tienen intención de mostrar que el ataque a las instituciones del 8 de enero “ya pasó a la historia” y siguen enfocados en la recuperación económica.
Por otro lado, el ex presidente Jair Bolsonaro dijo ayer que lamenta “lo que sucedió el día 8”, en su primera referencia al ataque a los tres poderes en Brasilia por parte de seguidores suyos, y admitió que cometió “deslices” en su gobierno. “Lamento lo que pasó el día 8, algo increíble, pero en mi gobierno la gente aprendió lo que es la política, conoció los poderes, empezó a valorar la libertad”, afirmó.