El político de 91 años falleció ayer en la capital rusa tras una larga enfermedad que lo mantuvo alejado de la política y la exposición mediática.
Gorvachov lideró la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) entre 1985 y 1991. Con su gestión lanzó una serie de reformas políticas y económicas para modernizar y democratizar la URSS.
Con la “glasnost’’ buscó liberalizar el sistema político, acusado de estar férreamente controlado por el Partido Comunista, por lo que los medios de comunicación obtuvieron mayor libertad para criticar al gobierno. Esta política se volvió en su contra, con mayor descontento social hacia el partido.
Con la “perestroika” intentó modernizar la economía, con la descentralización y mayor autonomía para los ministerios. Sin embargo, esta política aceleró la desintegración de la URSS por el crecimiento del nacionalismo de las repúblicas dentro de la Unión Soviética.
Ante la crisis económica, Gorbachov redujo los gastos militares: en 1987 firmó el tratado de desarme pactado con Estados Unidos, gobernado por Ronald Reagan, y la retirada de Afganistán dos años más tarde.
Las retiradas militares abrieron camino a los procesos independentistas que acabaron con los regímenes comunistas en Europa central y oriental, facilitando el camino para la reunificación de Alemania (1990). Partidario del acercamiento con Occidente, ganó en 1990 el Premio Nobel de la Paz. Gobernó hasta la disolución de la URSS, tras su dimisión el 25 de diciembre de 1991.