El gobierno de Irán confirmó ayer la muerte del presidente del país, Ebrahim Raisi, del ministro de Exteriores, Hosein Amirabdolahia, y del resto de acompañantes en el accidente de helicóptero sucedido durante la tarde del domingo en una zona montañosa y de difícil acceso en el extremo norte de Irán. Los cuerpos fueron recuperados por los rescatistas y trasladados a la ciudad de Tabriz.
”El ayatolá Ebrahim Raisi, presidente de la República Islámica de Irán, ha sido martirizado mientras servía al pueblo. El helicóptero que transportaba a Raisi, (…) debido a las condiciones meteorológicas adversas, sufrió un accidente”, expresó un comunicado del gobierno iraní. Además, se informó sobre la muerte tanto de Amirabdolahian como del gobernador de Azerbaiyán Oriental, Malik Rahmati; el ayatolá Mohamad Alí Ale Hashem, imán encargado de los rezos del viernes de Tabriz, y otros miembros del equipo de seguridad, los pilotos y la tripulación del helicóptero.
El primer vicepresidente de Irán, Mohammad Mokhber, fue nombrado como presidente en funciones de la República Islámica. Mokhber, de 68 años, ha ejercido un papel más discreto que otros políticos en la teocracia chiita, pero las normas constitucionales colocaban a Mokhber en primera línea tras la muerte de Raisi. Estaba previsto que ejerciera de presidente en funciones unos 50 días antes de unas elecciones presidenciales obligatorias.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, el primer ministro de India, Narendra Modi, y su homólogo iraquí, Mohamed Shia al Sudani, se mostraron “consternados” por la muerte de Raisi y del resto de los funcionarios, minetras que Hamás agradeció “el apoyo a la resistencia palestina” del difunto jefe de Estado.
Por otro lado, el abismo que se abre en las relaciones diplomáticas entre Irán y Occidente pudo verse en las tímidas condolencias que la Unión Europea y la OTAN publicaron al confirmarse la muerte de Raisi. “La UE expresa sus sinceras condolencias […] Nuestros pensamientos están con los familiares”, lanetó el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, en X. La OTAN, en cambio, dejó que sea su portavoz, Farah Dakhlallah, quien dé el pésame “al pueblo de Irán” en redes sociales.