El ex jefe de la Unidad Antisecuestros de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (Seido) de México, Gualberto Ramírez Gutiérrez, fue detenido ayer por su rol en la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, en 2014, según informó el subsecretario de Derechos Humanos del Gobierno de México, Alejandro Encinas.
Nuevas investigaciones indagan el papel de agentes de las fuerzas militares y policiales en connivencia con grupos del crimen organizado en los ataques contra los cinco colectivos en los que viajaba un centenar de estudiantes de magisterio en la ciudad de Iguala, Guerrero, en la noche del 26 de septiembre de 2014.
El ex funcionario está acusado de “desaparición forzada de personas, tortura y coalición de servidores públicos”, indicó Encinas.
Por otra parte, una jueza federal dictó ayer prisión preventiva para ocho militares que habían sido detenidos la semana pasada por el mismo caso, después de que la Fiscalía General reactivara 16 órdenes de captura emitidas en septiembre de 2022 y luego suspendidas. Esos militares están acusados “por el delito de desaparición forzada”, dijo Encinas.
De los 43 desaparecidos, solo tres jóvenes fueron identificados en ocho años de investigaciones, a partir de restos óseos calcinados hallados mediante estudios forenses genéticos, realizados en la Universidad de Innsbruck, Austria.