El primer ministro británico, Rishi Sunak, visitó ayer Israel, donde expresó su respaldo a las autoridades del país luego de los ataques del movimiento islamista palestino Hamás. “Estoy orgulloso de estar aquí con usted, como amigo, en la hora más oscura de Israel”, dijo Sunak en conferencia de prensa conjunta con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.
“Seremos solidarios con ustedes, estaremos con su pueblo, y también queremos que ganen”, agregó el líder conservador británico, el tercer gobernante que viaja a Israel tras los ataques del 7 de octubre.
Quien también se manifestó a favor de Israel fue el jefe de Gobierno alemán, el canciller federal Olaf Scholz, quien afirmó que los rehenes secuestrados por el movimiento islamista palestino Hamás durante sus recientes ataques en Israel deben ser liberados sin condiciones previas.
“Todos tenemos una tarea importante: liberar a los rehenes que han sido secuestrados. Deben ser liberados sin condiciones previas”, dijo Scholz. Por el contrario, el presidente de China, Xi Jinping, reclamó un alto el fuego entre Israel y Hamás y dijo que la creación de un Estado palestino es la “salida fundamental” al conflicto.
“La máxima prioridad ahora es un alto el fuego lo antes posible para evitar que el conflicto se expanda o incluso se salga de control, causando una grave crisis humanitaria”, dijo Xi. En tanto, Rusia alertó sobre el riesgo de que la guerra derive en un conflicto regional, al tiempo que informó sobre el envío de ayuda humanitaria a la Franja de Gaza.
“En lo relativo a la Franja de Gaza, el riesgo de que esta crisis derive en un conflicto regional es bastante grave”, subrayó el ministro de Relaciones Exteriores, Serguei Lavrov, quien resaltó que Moscú “está observando el intento de culpar de todo a Irán, lo cual es bastante provocador”.