Tres personas murieron hoy en un tiroteo registrado en un negocio de la ciudad estadounidense de Jacksonville, en el estado de Florida, en un incidente con trasfondo racial, informaron las autoridades.
«Este tiroteo tuvo una motivación racial y el (atacante) odiaba a los negros», declaró el sheriff de Jacksonville, T.K. Waters, en una conferencia de prensa, en la que dijo que el hombre, que era blanco, se suicidó tras el ataque.
El jefe policial informó que el autor de los disparos, que vestía un chaleco militar y portaba un rifle y una pistola, dejó mensajes para sus padres, los medios y las autoridades en los que detallaba su odio racial.
«Se trataba, francamente, de un loco que decidió que quería acabar con las vidas de otros», añadió Waters, en declaraciones recogidas por la cadena NBC.
Previamente, la alcaldesa de Jacksonville, Donna Deegan, había informado a la cadena CNN que hubo «múltiples víctimas».
«Es algo desgarrador para nuestra comunidad», señaló Deegan a los medios locales. «Es horrible y ha ocurrido demasiadas veces en esta comunidad», añadió.
Aún no estaba claro si los muertos se registraron dentro del negocio o en las inmediaciones.
La Universidad Edward Waters, ubicada cerca del lugar del incidente, emitió una advertencia para que la gente permanezca en el campus, aunque señaló que aparentemente no había estudiantes ni personal de la institución involucrados en el tiroteo.
«La policía de nuestro campus ha asegurado todas las instalaciones. Los estudiantes permanecerán en sus residencias durante la tarde hasta que se despeje el lugar», decía el alerta.
En el lugar del tiroteo había un fuerte despliegue policial, con equipos de intervención especial Swat, mientras que un helicóptero sobrevolaba la zona.