El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, destacó hoy que Rusia adoptó un «enfoque fundamentalmente diferente» en las negociaciones para poner fin al conflicto que se desencadenó con la invasión de su país por parte de fuerzas rusas el 24 de febrero.
En un encuentro en Moscú con su aliado bielorruso Alexander Lukashenko, Putin dijo la víspera que ahora las negociaciones tienen lugar «casi todos los días», pero no dio más precisiones.
Desde que empezó la invasión en Ucrania, el 24 de febrero, se organizaron tres rondas de diálogo en Bielorrusia, que estuvieron centradas sobre todo en la creación de corredores humanitarios para los civiles.
El jueves, los ministros ruso y ucraniano de Relaciones Exteriores se reunieron por primera vez en Turquía desde el inicio del ataque, pero no se produjeron avances hacia un alto el fuego.
«Nuestros intereses son cesar el fuego, liberar nuestros territorios. Y el tercer punto es resolver todas las cuestiones humanitarias», enfatizó el canciller Dmytro Kuleba sobre las exigencias de Kiev.
El Kremlin, en tanto, solicita que su contraparte reconozca a Crimea como parte de Rusia (la península fue anexada por Moscú en 2014 de forma unilateral) y a las regiones del este de Donetsk y Lugansk como estados soberanos, tal como lo decretó Putin antes de lanzar su ofensiva.
Por otro lado, insiste en la «desmilitarización» y la «desnazificación» de Ucrania, así como una promesa de un estatuto de país neutro que frene su ingreso a la OTAN.