Los ministros de Relaciones Exteriores de la OTAN mantuvieron ayer una difícil reunión en Noruega en busca de acuerdo sobre la adhesión de Ucrania, en medio de la guerra con Rusia y antes de la cumbre de la alianza prevista para julio en Vilna, Lituania. El secretario general de la alianza, Jens Stoltenberg, admitió pero minimizó el hecho de que no se hayan alcanzado entendimientos de fondo en la reunión en Oslo, alegando que se trató de una “reunión informal”.
Mientras tanto, de visita en Moldavia para una cumbre europea, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, aumentó la presión al afirmar que “cada duda que manifestamos en Europa, es una trinchera que Rusia tratará de ocupar.” A apenas un mes de esa cumbre de Vilna, los consensos siguen lejanos y ningún punto parece resuelto, en un cuadro que genera temores de un fracaso, especialmente entre los lituanos, anfitriones de la reunión.
En Oslo, con la presencia del secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, las discusiones se centraron en las garantías de seguridad que la OTAN puede ofrecer a Ucrania hasta que la adhesión al bloque transatlántico pueda hacerse realidad. “No ha habido decisiones, pero mantuvimos intercambios francos para hallar un consenso”, dijo Stoltenberg a periodistas. “No sabemos cuándo terminará la guerra pero debemos hacer que sean adoptadas medidas creíbles para garantizar la seguridad de Ucrania en el futuro”, agregó.
La OTAN ofreció esas garantías recientemente a Suecia, un país que formalmente demandó la adhesión pero que enfrenta el veto de otro actor central de la alianza, Turquía. El jefe de la diplomacia de Luxemburgo, Jean Asselborn, dijo que “la OTAN tendrá 75 años y jamás un país en medio de un conflicto armado ha adherido, porque ello podría acarrear convocar el artículo V del tratado”, de defensa mutua obligatoria. Si eso ocurriera, añadió, estaríamos frente a una “guerra entre la OTAN y Rusia”.
En tanto, Zelenski dijo en Moldavia que “todos los países europeos que tienen frontera con Rusia y no quieren que Rusia les arranque un pedazo de su territorio deben convertirse en miembros de la OTAN y de la UE”. También aseguró que la guerra terminará solo cuando venzan los ucranianos, o cuando Rusia salga de los territorios de Ucrania que ocupa.
Por su parte, Rusia dijo ayer haber repelido una incursión de soldados y tanques ucranianos, horas después de que sus fuerzas mataran a tres personas, incluyendo a un niño, en un nuevo ataque con misiles a Kiev, el más letal en un mes. Entre otras justificaciones, Rusia aseguró que invadió a Ucrania luego de que Estados Unidos, que lidera la OTAN, se negara a descartar la incorporación del país liderado por Zelenski a la alianza militar, algo que Moscú ve como una amenaza existencial. Al menos 12 personas resultaron heridas en los últimos bombardeos, según autoridades, un día después de que el vocero del presidente Vladimir Putin dijera que la situación en Belgorod era “alarmante”.