El abogado Claudio Orosz presentó, a través de su defensor Pablo Fresneda, una querella en contra del legislador Marcelo Cossar por «violación de secretos e injurias» en mesa de entrada de Tribunales 2.
Todo se debe a que el radical Cossar difundió, luego de que explotara el «vacunatorio vip» en Buenos Aires, una posible lista de cordobeses que fueron inmunizados «por debajo de la mesa», sin seguir el orden correspondiente. Entre uno de los listados difundidos estaba incluido el militante de los derechos humanos.
Enojado por estar en esa lista, Orosz presentó esta querella. Al respecto, aseguró que acompañó la acción judicial con «los emails oportunamente recibidos en mi casilla de correo tanto cuando me inscribí a través del CiDi, prácticamente los primeros días que se abrió la inscripción, como cuando me fue otorgado el turno». Con esto, expresó que demostrará «la inexistencia de privilegios o vacunatorio vip».
Además, sostuvo que es llamativo que Cossar incluyera la edad de todos los otros «privilegiados» pero no la suya, «justamente el que tenía más de 60 años y podía inscribirse en esos momentos». El abogado también comentó que junto a su hija, transplantada, inmunodeprimida y médica integrante de los equipos de salud, se inscribió en los primeros días de diciembre por tener él una afección respiratoria desde temprana edad. Su hija recibió la vacunación casi de inmediato y él esperó hasta que a comienzos de febrero recibió la notificación y concurrió a recibir la primera dosis.
Entre sus declaraciones, Orosz sostuvo: «Obviamente yo recibí mi email, tal como lo prueba ahí y con un turno me vacuné. Sin embargo, aparecí en una nota de un canal de Córdoba que expresaba lo que Cossar había dicho tanto en la Legislatura como el material que les había entregado, en el cual figuraba mi nombre». Por esto, comentó: «Ahora va a tener que ir a responder a la Justicia porque un acto médico como es la vacunación no puede ser relevado públicamente por un funcionario público, lo que está expresamente prohibido por la ley y a responder por los ataques a mi honor personal realizado de manera tan alevosa».
Por último, expresó su deseo de que el resto de las personas mencionadas por el legislador, al que calificó como «lenguaraz», también procedan de igual forma y que reciba «el máximo de condenas que se le pueden aplicar tanto del punto de vista penal como del punto de vista civil».
Ahora, deberá sortearse una Cámara del Crimen para que tramite la querella, un proceso oral que se realiza directamente ante un juez y en el que las partes exponen sus argumentos.