Con la popularidad intacta por su larga carrera deportiva, Héctor Oscar Campana se sumó a la lista de posibles compañeros de fórmula de Daniel Passerini, lanzado por el llaryorismo puro para suceder al actual intendente.
Todo indica que la disputa por ese lugar clave será con Miguel Siciliano, el secretario de Gobierno y Gestión de la Municipalidad, quien mantiene a su tropa movilizada para compensar con territorialidad la popularidad que arrastra el “Pichi” de sus años en el básquet como jugador de Atenas, varias veces campeón argentino, y de la selección nacional.
Campana saltó a la política en 2003, de la mano de Luis Juez, y ocupó por primera vez una banca en el Concejo Deliberante. Al poco tiempo, comenzó a desmarcarse del ahora senador de Juntos por el Cambio mientras se acercaba al otrora poderoso Ricardo Jaime, en tiempos del kirchnerismo imbatible.
Para dar un golpe simbólico, Juan Schiaretti lo llevó como candidato a vicegobernador en 2007, en la disputada elección contra Juez que le valió su primer mandato. En 2011, alineado con Alejandra Vigo, fue candidato a intendente y enfrentó a Ramón Mestre. Luego, fue legislador y ahora ocupa la Agencia Córdoba Deportes, una mega pantalla por la gestión de los grandes eventos de fútbol, tenis y recitales en esta capital.
A los suyos, Campana les dijo que se siente “preparado” y en “armonía” para encarar la elección municipal. Manifestó su intención de competir por la intendencia, pero la definición a favor de Passerini lo dejó fuera de cancha, reveló en un informe el periodista Juan Manuel González.
Sin embargo, la viceintendencia no es, en el caso del peronismo, un premio consuelo: se trata de una silla clave porque Daniel Passerini, actual viceintendente, no podría competir en una eventual reelección en 2027 (en caso de ganar los comicios), por lo que su segundo quedaría en la línea de largada para el próximo turno.
Una medición de diciembre, encargada desde el comando de campaña de Llaryora, determinó que Campana tiene un 75% de conocimiento en toda la provincia, ubicándose en el top de popularidad; mientras que un 36% respondió que no tiene opinión formada respecto de su imagen, y 9 % lo valora negativamente.
Con 15 años de pertenencia, el “Pichi” es considerado en el peronismo un viguista puro, y no hay objeciones personales hacia él en el esquema de la senadora y esposa del gobernador. Al contrario. Campana no sólo demostró lealtad, también creció en experiencia legislativa y capacidad de gestión, dice de Campana una dirigente del PJ Capital que no quisiera dejarle al delasotismo el control absoluto del Palacio 6 de Julio (Passerini saltó a las grandes ligas provinciales de la mano de José Manuel de la Sota, de quien fue ministro).
Además de la vidriera del estadio Kempes, sede de la Agencia de Deportes, Campana participa de las inauguraciones de polideportivos barriales que encabeza Schiaretti en nuestra ciudad. Se trata de un plan para construir 100 polideportivos en zonas vulnerables de la Capital y las principales ciudades del interior. Se habilitaron 37 y el Gobierno espera sumar 18 más antes de las elecciones provinciales.