La Unión Cívica Radical (UCR) elegirá el próximo viernes al nuevo titular del partido, en medio del clima de tensión interna por la fractura del bloque en Diputados y acusaciones cruzadas entre los distintos sectores. El 17 de diciembre están convocados los delegados partidarios que deberán elegir quién regirá los destinos del centenario partido en reemplazo del mendocino Alfredo Cornejo.
El gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, es quien aparece en la previa con mayores consensos para quedarse con la titularidad del Comité Nacional de la UCR: tiene entre 60 y 64 voluntades aseguradas, de un total de 94 en condiciones de votar. En este contexto, crecen las especulaciones respecto de si el eventual postulante para enfrentarlo, el senador Martín Lousteau, decidirá finalmente presentarse como candidato o declinará su participación al verse en minoría.
La que pasó fue para el radicalismo una de las semanas de mayor ebullición política, con la decisión de 12 diputados nacionales de romper con el bloque mayoritario en Diputados y conformar una bancada diferenciada, llamada UCR-Evolución, y que se referencia en los dirigentes Martín Lousteau y Emiliano Yacobitti. El nuevo bloque estará presidido por el cordobés Rodrigo de Loredo, quien le ganó la interna local a Mario Negri, que seguirá al frente del bloque mayoritario que tiene 33 integrantes.
Yacobitti dijo ayer que desde ese sector están dando una “pelea” para que “figuras nuevas” tengan las vocerías del interbloque de Juntos por el Cambio (JxC) en el Congreso, al advertir que la oposición no puede “tener siempre las mismas caras”, y justificó la tensión que se vive en la UCR al señalar que se debe a los “reacomodamientos internos” del partido.
El quiebre generó múltiples repercusiones: desde lo institucional, la conducción radical de tres distritos -Entre Ríos, Neuquén y La Pampa- pidieron formalmente que los diputados que se fueron con Lousteau vuelvan al bloque de Negri.
En materia de declaraciones, Morales acusó a Horacio Rodríguez Larreta de estar detrás de la ruptura del bloque, y dijo que le pedirá explicaciones el miércoles próximo, cuando se reúna la Mesa Nacional de JxC. También se metió en la discusión Patricia Bullrich, titular del PRO, quien le pidió a los radicales que “se dejen de joder” y recordó que a JxC lo votó más de 10 millones de argentinos hace tres semanas.
El embajador argentino en España, Ricardo Alfonsín, fue más allá y planteó que la primera discusión que debería darse el radicalismo es si debe continuar dentro de la coalición opositora. “Si la UCR representa lo que es desde 2015, yo no me hubiera afiliado”, expresó.