El impactante triunfo del economista Javier Milei (La Libertad Avanza) en las primarias sacudió los cimientos de la dirigencia política tradicional y dejó en estado de shock especialmente a Juntos por el Cambio (JxC), que amenaza con disgregarse ante los coqueteos de su líder y fundador del PRO, el ex presidente Mauricio Macri, con el candidato ultraliberal.
El propio Milei intenta aprovechar la incertidumbre en la alianza y el viernes sorprendió a todos al afirmar que si llega a la Casa Rosada designará a Macri como una suerte de “embajador plenipotenciario”. “Con Macri hablamos de varios temas. Me ha sorprendido muy gratamente que no solo se ocupó de preguntarme cosas de la economía sino que ha mostrado un lado humano”, sostuvo el también diputado, quien al ser consultado sobre si lo sumaría a un eventual Gabinete, respondió: “Yo creo que tendría un rol destacado como un representante de la Argentina”. Es más, Milei esbozó que Macri sería “una figura por encima de Cancillería y demás, como un representante del país. “Un embajador plenipotenciario, una cosa así. No sé cómo se define. Habría que crear la figura. Pero creo que es alguien que puede representar al país en el mundo y abrir, digamos, mercados”, añadió.
La invitación cayó como un baldazo de agua fría en JxC, cuyo estupor creció con el correr de las horas ante el silencio del ex presidente. “Macri y todos en JxC se tienen que alinear a la nueva campaña”, salió a reclamar la propia candidata presidencial Patricia Bullrich; mientras que su armador político, Damián Arabia, planteó que “queremos a todos nuestros dirigentes, incluido a Mauricio haciendo campaña. Necesitamos a todos”.
Otros dirigentes fueron mucho más duros: Elisa Carrió, “socia fundadora” de Cambiemos, renunció a su candidatura al Parlasur; mientras que el ex ministro de Economía y ex titular del Banco Central, Alfonso Prat Gay, directamente cuestionó al ex presidente por “coquetear” con Milei. “En esta discusión Macri tiene un rol importante para jugar. Dijo que iba a ser neutral en la interna de JxC y no lo fue y ahora resulta que, no solo no fue neutral, sino que ahora está haciendo neutral en la general”, señaló su ex funcionario, quien dijo que “hay una especie de coqueteo con Milei que confunde mucho al votante”. “Todos los que estamos en JxC vamos a responder genuinamente al resultado de las elecciones. Esto implica respetar las reglas de juego y que los pactos son sagrados. Usted no puede jugar y, si va perdiendo, cambiar las reglas. Nosotros creemos en la lealtad (…) espero que todos actúen de esa manera”, afirmó también Ricardo López Murphy tras una consulta sobre la cuestión.
Recién anoche, al cierre del fin de semana largo, el PRO publicó un video en sus redes sociales en el que Macri respalda la candidata presidencial de Bullrich. Se trata sin embargo de un fragmento de una entrevista recortada, donde Macri destaca los valores de Bullrich, al igual que su “firmeza y honestidad”. Muchos esperan aún su palabra oficial.
Se multiplican las críticas a la idea de cerrar el Incaa
El titular del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa), Nicolás Batlle, defendió este sábado la actividad de ese organismo al destacar que se trata de “un motor enorme de la producción local”, que “genera películas que nos representan locamente y en todo el mundo”, tras la advertencia del candidato a jefe de Gobierno porteño por La Libertad Avanza (LLA), Ramiro Marra, de cerrar el instituto.
“El sector audiovisual genera puestos de trabajo de calidad, es fundamental crear mercados de trabajo”, expresó Batlle y señaló que el organismo fomenta la producción de “200 películas anuales, entre cortos, medios y largometrajes”, entre otras tareas.
Ya la semana pasada, el propio Javier Milei había amenazado con cerrar el Incaa en caso de ser Presidente, alegando que genera déficit. “Lo vamos a cerrar, igual que la Televisión Pública, igual que (la agenda de noticias) Télam”, afirmó entonces.
Por otro lado, la científica Sandra Pitta -afín a JxC- salió en defensa del Conicet al aseverar que “para afuera, parece un antro de ñoquis kirchneristas”, pero dijo que los críticos del organismo “no conocen muy bien cómo funciona el sistema”.