El acto encabezado por la candidata a vicepresidenta de La Libertad Avanza (LLA), Victoria Villarruel, en la Legislatura porteña para homenajear a “las víctimas de ataques perpetrados por agrupaciones guerrilleras” generó un amplio rechazo en casi la totalidad de la clase política -excepto Juntos por el Cambio y el partido libertario-, bajo la acusación de tiene un fin “negacionista” de la dictadura cívico-militar y los crímenes del terrorismo de Estado que ejecutó entre 1976 y 1983.
Los integrantes de organizaciones de derechos humanos como Hijos, Madres y Abuelas de Plaza de Mayo o partidos de izquierda se manifestaron en los alrededores de la Legislatura porteña en rechazo al acto en medio de un fuerte operativo de seguridad montado por el Gobierno porteño. “Villarruel dice que busca memoria completa, pero lo que en realidad quiere es la impunidad de los genocidas”, aseveró allí la candidata presidencial del Frente de Izquierda-Unidad (FIT-U), Myriam Bregman; mientras que el presidente Alberto Fernández acusó al propio Javier Milei de ser “negacionista” y representar a una “casta económica” que “posterga el desarrollo del país para seguir concentrando el ingreso y la riqueza”.
“Es una mentirosa y una mala persona”, agregó la presidenta de las Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, quien calificó de “aberrante” al acto. “Esta persona (por Villarruel), en este momento crucial que estamos viviendo sobre qué gobierno queremos (…); sale a romper con una historia que ya está escrita y probada. Ella miente y propone esto con el fin de crear caos en la sociedad, para que nos peleemos entre nosotros”, dijo Carlotto, quien llamó a no darle “ni un minuto de tiempo a esta gente repudiable”.
“No es un acto, es apología del genocidio. JxC le abre la Legislatura a negacionistas pro-milicos como la impresentable de Villarruel. Pero a quiénes bancamos la Memoria, la Verdad y la Justicia, nos ponen vallas”, se quejó la dirigente de izquierda Celeste Fierro, mientras que la CGT repudió el acto y advirtió que “estos sectores pretenden reinstalar la teoría de los dos demonios y avanzar con las políticas del olvido y la negación como complemento necesario para profundizar el plan de saqueo y entrega de la Patria”.
Desde JxC nadie salió a hablar excepto la candidata presidencial Patricia Bullrich, quien aseveró que “lo que haga LLA no es un tema que a nosotros nos atañe, es una decisión de ellos que sea una prioridad de la Argentina”.
Servini aclara los delitos de lesa humanidad
La jueza federal María Servini reiteró ayer que el atentado al comedor de la Superintendencia de Seguridad Federal de la Policía Federal el 2 de julio de 1976, atribuido a Montoneros, no puede considerarse como “delito de lesa humanidad” y ratificó así su negativa a reabrir la causa.
La jueza resolvió luego de que en junio del año pasado la Cámara Federal porteña declaró nula una resolución suya y le ordenó volver a analizar el tema, a pedido de un grupo de querellantes.
“Fueron mis superiores, quienes ratificaron y concluyeron que el suceso criminal (…) no configuró un delito de lesa humanidad ni un crimen de guerra”, como tampoco fue “un acto de terrorismo en los términos de la definición prevista en el Convenio Internacional para la Represión de la Financiación del Terrorismo, ni una grave violación a los derechos humanos”, concluyó la jueza.