En su primer informe de gestión desde que asumió el miércoles pasado como “superministro” de Economía, Sergio Massa estimó que con el ajuste de subsidios que impactará en un aumento segmentado de las tarifas de energía y agua, el Estado estará en condiciones de ahorrar 500.000 millones de pesos al año.
Lo hizo a través de un extenso hilo de Twitter que difundió el titular de Hacienda el sábado pasado, en el cual ratificó que citó para mañana a los responsables de los ministerios para fijar un “techo” de gastos y anunció que “no habrá más emisión para financiamiento hasta fin de año” y que comenzará hoy con los “reintegros al Banco Central”.
“Empezamos en coordinación con todos los sectores de la administración pública la fijación de topes al ingreso de personal, y a partir del 1° de septiembre debe estar publicada con acceso público cada declaración jurada en la página de Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec)”, agregó Massa. El congelamiento de la plantilla estatal es otro de los gestos de austeridad fiscal que el líder del Frente Renovador quiere dar a los mercados, aunque en este caso no se trate un ahorro tan significativo de recursos.
En cuanto a los mecanismos ilegales de subfacturación de exportaciones y sobrefacturación de importaciones que ya había dado cuenta la Dirección General de Aduanas, Massa especificó que ya se iniciaron notificaciones a 722 empresas, y ratificó que el perjuicio al Estado por esas defraudaciones alcanza los 1.000 millones de dólares.
Entre las definiciones que el ministro comunicó a través de la red social, aseguró que habrá un control más incisivo de las importaciones y en ese sentido se anunció que “ya está en funcionamiento un esquema de coordinación para garantizar que los dólares de las importaciones estén enfocados a la producción y la salud”. En paralelo, el fomento de las exportaciones para “la fábrica de dólares” está al tope de las prioridades de gestión de las nuevas autoridades de Economía. En esa línea, anunció el lanzamiento de un programa de crédito “a los efectos de que las pymes vendan trabajo argentino al mundo”.
En cuanto al financiamiento sin emisión monetaria, Massa detalló que “se firmará contrato con Agenda del CAF” (Banco de Desarrollo de América Latina), al tiempo que “se mantienen conversaciones de trabajo con el BID por el Programa de Desembolsos y el trabajo coordinado entre Argentina y este organismo”.
Por otra parte, informó que estuvo reunido con la directora de la Anses, Fernanda Raverta, para “revisar los escenarios” posibles ante el anuncio de que otorgarían un nuevo bono para reforzar el ingreso de los jubilados. “El día miércoles anunciaremos la medida, que incluye además del índice normal, un acompañamiento adicional a nuestros jubilados. El anuncio se hará a las 17. A ese acompañamiento lo vamos a respaldar en una mayor recaudación por anticipo de Ganancias decidida por Afip, para que a ese ingreso de sectores con mayor capacidad de pago, lo volquemos en uno de los sectores que más sufre sin afectar el orden de nuestras cuentas”, argumentó el líder de la tercera fuerza que integra la coalición de gobierno.
El área energética cambia de nombres
Luego de que Sergio Massa decidiera ampliar el recorte de los subsidios a las tarifas de electricidad y gas, surgieron dudas sobre la implementación, en medio de las demoras para definir a un nuevo equipo en el área de la Secretaría de Energía.
Si bien el nuevo ministro de Economía ya había decidido la salida del kirchnerista Darío Martínez como secretario del área, su reemplazante recién se conoció anoche. Pasada las 20, Massa anunció que la ingeniera salteña Flavia Royón será la encargada de ocupar la titularidad de la sensible secretaría.
El principal obstáculo a sortear era que el o la nueva funcionaria debía contar con la aprobación de la vicepresidenta, Cristina Kirchner, quien se reservaba el poder de veto en esa área, porque la considera indispensable para mantener el voto de un sector de la clase media.
A la vez, el área de Energía es clave por su incidencia en las cuentas públicas. Si se aplicara lo que pretende Massa, el recorte de subsidios rondaría los 110.000 millones de pesos en el último cuatrimestre del año. Además, permitiría aplicar un recorte de unos 500.000 millones en 2023, necesario para cumplir las metas de déficit fiscal comprometidas con el FMI.
En este marco, el titular de Hacienda anticipó el sábado que será la propia Secretaría de Energía la que dará a conocer el jueves próximo los nuevos valores tarifarios de los servicios de gas, energía eléctrica y agua, en un esquema que tendrá en cuenta la progresividad y las diferencias por zona, respetándose “las particularidades de cada región”, comunicó.