El presidente Javier Milei aseguró que el gobierno no aplicará la vacuna contra el dengue, al asegurar que para cuando haya que darse la segunda dosis «los mosquitos habrán desaparecido».
El mandatario nacional se expresó sobre el problema que atraviesa la Argentina con el dengue durante una exposición ante alumnos de la Universidad de Florida, en Miami. Lo hizo al lanzar duras críticas al senador y titular de la UCR, Martín Lousteau, quien había cuestionado a su gobierno por la falta de repelentes en medio de la crisis del dengue.
«He recibido la crítica muy torpe de parte de un senador, que además encima es economista. Se estaba quejando porque los repelentes estaban subiendo. Hay una epidemia de mosquitos, un montón de mosquitos porque no se hizo campaña el año anterior, sí, claro, hay mosquitos. Al otro año hay epidemia de mosquitos, el famoso dengue», comenzó Milei.
Y continuó: «Este torpe, mediocre y pésimo economista, para ser educado, dijo que era por el Presidente, porque ´acá tenemos un fallo del mercado. Como el Estado tiene más información tiene que resolverlo´. Un conjunto de estupideces verdaderamente fenomenales».
«Lo primero que hay que entender es que hay un elemento que hace que se dispare la demanda, lo normal es que se dispare el precio. Cómo un economista va a quejarse de que si aumenta la demanda aumente el precio. El chico está flojo de economía», sostuvo el Presidente.
En ese sentido, indicó que «el problema estaba en las restricciones del gobierno anterior» para importar repelentes: «Abrimos la importación y el sector privado lo resolvió solo». «Este muchacho defendía que se vendieran las vacunas. Ahora para que las vacunas sean efectivas tienen que darse la segunda dosis, pero hay que esperar tres meses y para el momento los mosquitos habrán desaparecido», subrayó sobre las vacunas contra el dengue.
También, señaló que las vacunas «recién se están probando en humanos para ver que no tengan efectos colaterales, pero los laboratorios tiene intereses». «Acaso este chico tendrá algún interés de que esto fluya como
negocio. Y también está claro que muchos periodistas sí tienen intereses», agregó Milei.