Las apuestas en línea están empezando a ser una preocupación para los gobiernos y ese es el caso de Inglaterra, un país con mucha cultura de apuestas que ahora se ve desbordado por el exceso de anuncios de publicidad que incitan a las apuestas y los juegos de casinos en línea.
El Gobierno inglés, por medio de la Sanidad Pública, tuvo que tomar cartas en el asunto debido a que el problema se está convirtiendo en una amenaza a la salud de sus ciudadanos.
La cartera de Salud de Inglaterra anunció este domingo la apertura de nuevas clínicas de ludopatía tras registrar un aumento de los casos que atribuye al mayor acceso a través de aplicaciones en los teléfonos móviles y al «bombardeo» de anuncios de las casas de apuestas. El número de personas derivadas para tratamiento de dicha adicción casi se duplicó en los últimos dos años.
El Gobierno encabezado por Rishi Sunak se vio obligado a tomar esta medida para contener el problema de las apuestas que se ve potenciado por las que se hacen en línea y por la publicidad permanente, principalmente en eventos y cadenas de radio y televisión deportivas.
Inglaterra fue un país siempre muy acostumbrado a las apuestas, por lo cual es normal encontrar pequeñas casas de juego en todos los pueblos desde hace décadas, pero, hoy en día, con la facilidad que dan las nuevas tecnologías, el problema parece haber superado todo límite conocido hasta el momento.
La directora del Servicio Nacional de Salud (NHS, en inglés) de la región de Inglaterra -el resto de territorios británicos tienen sus propias competencias-, Amanda Pritchard, indicó que este verano europeo se habilitarán siete clínicas en varias ubicaciones, las cuales se sumarán a otras ocho ya existentes y a otra que trata a menores de edad.
Las nuevas tecnologías le exigen al Gobierno inglés actualizar y modernizar su red de contención para frenar esta problemática de salud pública, ya que, las instituciones que hasta ahora se ocuparon del problema ya no parecen ser suficientes.
La publicidad permanente de los juegos de azar en los medios de comunicación naturalizan y banalizan una actividad que tiene muchos riegos (que son minimizados o negados en los medios) para los ciudadanos.
La elección de las transmisiones deportivas como puerta de entrada no es casual, el deporte legitima socialmente la actividad de las apuestas.
El problema de la ludopatía en números
Las últimas cifras difundidas este domingo revelan que en los doce meses hasta el pasado marzo, hubo 1.389 personas derivadas para tratamiento por su adicción al juego, frente a 1.013 en 2021- 22 y 775 en 2020-21.
Los datos más recientes de la Comisión pública de juegos de azar estiman que el 0,3% de la población mayor de 16 años en Inglaterra, unas 138.000 personas, tiene una relación problemática con el juego, mientras que el 2,9%, o 1,3 millones, se dedica al juego de riesgo moderado o bajo.
Luz de alerta también para Argentina
En el país se está replicando, casi calcado, el modelo de Inglaterra y otros países de Europa. A pesar de todas las alertas que podemos ver por todos los problemas que ocasionaron las apuestas en línea en el Viejo Continente, hoy son recibidas con los brazos abiertos en América Latina en general y Argentina no es la excepción a la regla.
Mientras que en numerosos países de Europa endurecen cada vez más el marco regulatorio de las casas de apuestas en línea, en Latinoamérica aun son sorprendentemente laxos e, incluso, hay varios países que aún se encuentran discutiendo el marco legal en el que se desempeña la actividad.
No obstante, la actividad, casi nula por estas tierras hasta hace unos pocos años, hoy prolifera a un ritmo vertiginoso.
No es casual la explosión de las casas de apuestas en línea de este lado del mundo y, por el endurecimiento de las reglas en Europa, muchas empresas de la actividad se encuentran en retirada y vienen a explorar nuevo mercados.
Esos mercados están gustosos de recibir el dinero fresco que acercan las apuestas Online, tanto en patrocinio como en ingresos fiscales para el Estado, pero no deberían perder de vista que con ese dinero también vienen aparejados muchos problemas que, a la larga, se hacen tan grandes que superan los supuestos beneficios que trae la actividad en un principio.
Europa nos está avisando, las autoridades locales tendrían que tomar nota y endurecer ya mismo los marcos regulatorios de la actividad, además de mejorar los resortes del Sistema de Salud para responder a una problemática que se acerca inexorablemente. Y todo esto sin perder tiempo, antes de que sea demasiado tarde.