Los trabajadores de la embotelladora de agua y soda Kelvy reclaman una respuesta por el repentino cierre de la planta, producido a fines del mes pasado, el cual dejó a más de una decena de personas en la calle. De acuerdo a lo que indicaron los ex empleados de la fábrica en declaraciones a HOY DÍA CÓRDOBA, la empresa cerró sin dar explicaciones, dejándolos a la deriva.
Mauricio Rodríguez, de la Comisión Directiva del Sindicato Unificado de Trabajadores de la Industria de Agua, Gaseosas y Afines (Sutiaga), explicó que la empresa cerró sus puertas el día 28 de abril. No se nos permitió el ingreso a cumplir tareas, fue todo sin ningún tipo de explicación”. Se negaron a comparecer a tres audiencias fijadas por el Ministerio de Trabajo”, agregó.
A su vez, Rodríguez aseguró que los dueños de Kelvy se niegan a abonar los haberes de abril, pese a estar intimados”. Todo eso nos obligó, dado el carácter alimentario de los haberes, a recurrir a la Justicia laboral solicitando medidas especiales”, agregó.
En tanto, el sindicalista sostuvo que la desesperación y el abandono de los compañeros de Kelvy por parte de su empleador (más de 10 a 20 años de antigüedad en la mayoría de los casos)”, les obliga a estar en la vereda de la sodería, en un acampe reclamando” por sus derechos. Es de una insensibilidad patronal que no puede pasar desapercibida”, expresó el representante.
En tanto, el integrante de Sutiaga manifestó que generan un daño social a un grupo de familias que dependen de los salarios ganados, tras muchos años de prestar tareas en esta sodería”.
Por otra parte, Rodríguez agregó que la empresa tiene una amplia clientela, que no tuvo merma en su producción en los últimos meses”. Llama poderosamente la atención esta conducta empresaria, que ni siquiera se presenta a dar alguna explicación o intento de solución para retomar la fuente laboral, dado que está vigente la prohibición de despidos”, concluyó.
Cabe mencionar que, en medio de esta situación, ayer se dio una nueva audiencia en el Ministerio de Trabajo, en la que se requirió la presencia de los dueños de la fábrica para intentar llegar a un acuerdo. Sin embargo, ningún representante por parte de los dueños de Kelvy se hizo presente, por lo que los ex empleados continúan con su reclamo.