La quita de subsidios a las tarifas de electricidad y gas por redes afectará a 39,1% de los usuarios de la Empresa Provincial de Energía de Córdoba (Epec) y de Ecogas, y a 61,4% de los clientes de las cooperativas eléctricas de la provincia de Córdoba. En la práctica, el aumento en las tarifas será del 20% promedio, tanto para la energía eléctrica como para el gas.
Sin embargo, en noviembre regirá un nuevo escalón, en este caso de 40%, y en enero se completará con el 40% restante, es decir que, desde entonces, los usuarios alcanzados pagarán tarifa plena que en la práctica implicará aumentos de tarifas de entre el 100% y 130%.
Tanto en Epec como en Ecogas y en las cooperativas, hay marcada preocupación por el impacto que tendrá en los clientes el retiro de la ayuda estatal. En ese sentido, temen que, desde diciembre, cuando impacte el segundo escalón de aumentos, los usuarios provoquen un aluvión de reclamos en los únicos lugares con los que cuentan para quejarse: las empresas.
En ese marco, según reveló ayer un informe del diario Comercio y Justicia, hasta el 3 de octubre pasado, último dato disponible, el 39,1% de los usuarios residenciales de la Epec seguían categorizados como N1 (sin subsidio). En esa categoría están quienes tienen ingresos altos y los que no se anotaron en el Rase (Registro de Acceso a los Subsidios a la Energía).
En el caso de Ecogas, señalaron que la tendencia es similar a la de Epec. Previo al inicio de la quita del aporte estatal, 303.842 usuarios de la distribuidora de gas estaban alcanzados por el aumento, el 42% del total. Por su parte, en las cooperativas eléctricas la situación es aún más alarmante, ya que, de los 274.502 de usuarios que figuraban como N1 a mediados de septiembre pasado (62,7% del total de clientes residenciales), apenas 5.696 completaron el formulario y quedaron exentos del incremento.