Dos violentos hechos ocurridos en nuestra ciudad cobraron relevancia nacional este fin de semana. El primero ocurrió el sábado y fue la amenaza de muerte, junto a seis balas y esvásticas pintadas en la puerta de la casa de Fernando Albareda, hijo de Ricardo Fermín Albareda Kalemberg, desaparecido durante la última dictadura militar. En tanto, el segundo episodio fue la apedreada que recibió el viernes el ingreso vidriado del edificio de la emisora de Radio Nacional Córdoba en pleno centro de nuestra ciudad, por el cual fue detenido Axel Pereyra (18).
Los mensajes en la casa de Albareda, junto con pintadas de cruces esvásticas, tenían violentas amenazas: “Sos hijo de terrorista. Se te terminaron los amigos de la Policía”, “No vayas más a la escuela ni a jefatura. Va a morir”. Final-mente, uno decía: “Te vamos a juntar con tu papito”.
Luego de las amenazas, Fernando Albareda y su familia compartieron un comunicado y reiteraron su preocupación por lo acontecido: “Compañe-ras, compañeros, amigas, amigos… pasé por lo mismo en alguna oportunidad, pero como hoy, nunca”.
“Sólo me interesa cuidar a los míos y en caso de que esto continúe, estar atentos”, dijo Fernando, quien agregó: “Obviamente hice la denuncia. Es y fue real. Los carteles y las balas eran de verdad”. Asimismo, Albareda dijo que tanto él como su familia se encuentran bien.
Por su parte, la agrupación Hijos Córdoba repudió “enérgicamente” las amenazas que sufrió uno de sus integrantes y su familia esta mañana. Además, exigió a la Justicia el “urgente esclarecimiento y castigo a los responsables”.
Con respecto al segundo episodio registrado, Pereyra fue detenido a una cuadra de la emisora, donde fue destrozado con una piedra el ingreso vidriado al auditorio. Tras el hecho vandálico, el acusado protagonizó un violento episodio con los efectivos antes de su detención.
Al respecto, el parte policial detalló que “al arribo del personal policial, el masculino se torna agresivo con los mismos y al proceder a reducirlo le provoca una lesión en la rodilla izquierda al cabo primero Ortiz Maximiliano (…) y al sargento Salgado Rolando (…) le provoca una lesión en la muñeca y antebrazo derecho, siendo trasladados por el oficial ayudante Calviño (…) hacia el Policlínico Policial para ser asistidos”. Por su parte, el director de Radio Nacional Córdoba, Luis Zanetti, dijo sobre el episodio que evidentemente “no tuvo intenciones de robo, sino que se trató de un acto de violencia” contra la institución radial.