Un episodio estremecedor se produjo durante el cortejo fúnebre de Milagros Utrera, la joven de 26 años que murió atropellada el pasado sábado en Colonia Caroya. Según fuentes oficiales, una mujer al volante de un Ford Ka embistió a una de las personas que participaba del cortejo -presuntamente la tía de la víctima– y luego se dio a la fuga.
El incidente continuó cuando la conductora chocó otro vehículo que ingresaba al cementerio parque, donde descansan los restos de Milagros, y finalmente terminó incrustada contra un semirremolque estacionado en calle 42, a varios kilómetros del lugar.
Todo comenzó alrededor de las 11, cuando cientos de personas acompañaban los restos de la joven. La automovilista atropelló a la mujer y se retiró del lugar, impactando poco después a otro vehículo desde atrás. Testigos relataron que el conductor del auto embestido intentó solicitar los datos del seguro, pero la mujer intentó atropellarlo nuevamente antes de escapar.
Una camioneta inició una persecución que culminó cuando el Ford Ka chocó contra un camión estacionado, quedando inutilizado. La conductora fue trasladada a un centro de salud, aunque inicialmente se negó a recibir asistencia.
“Sentimos el impacto y mi sobrino -que manejaba- se baja para ver quién lo había chocado. Cuando pidió los datos a la señora, ella lo encaró para atropellarlo y él tuvo que saltar para salvarse”, relató un familiar.
Este episodio se suma a la tragedia que ya atraviesa la familia de Milagros Utrera, quien había fallecido tras ser atropellada mientras volvía de trabajar en bicicleta. El conductor responsable de aquel siniestro, Claudio Toniatto (22), quedó detenido por homicidio culposo.
El comisario Jesús Maldonado confirmó que Toniatto presentaba halitosis alcohólica al momento de su detención y que se le realizará un examen toxicológico más exhaustivo, cuyos resultados aún no están disponibles.