En una nueva jornada del juicio contra la denominada «Banda de los copitos» por el intento de magnicidio de Cristina Kirchner, el acusado Nicolás Carrizo se quebró hoy en llanto al declarar, mientras aseguró que no tenía «nada en su contra» y que «nunca mataría a una persona».
En tanto, otra de las acusadas, Brenda Uliarte, no pudo prestar declaración ante los integrantes del Tribunal Oral Federal 6 (TOF 6), ya que pidió retirarse porque «no se sentía bien».
El señalado como el líder de los «copitos», sostuvo que «nunca tuvo un arma en la mano y que no mataría a una persona».
Además, afirmó que «estaba esperando» desde hacía «un montón para hablar» frente al tribunal que lo juzga por el intento de asesinato del pasado 1 de septiembre de 2022.
«Pensé que esto iba a resolverse antes y nunca llegaba el día. Por fin llegó y puedo dar mi versión. No tengo anda en contra de Cristina, yo jamás mataría a una persona. Ni loco me voy a meter en algo así. Es por lógica que son chistes», señaló Carrizo.
Por otro lado, remarcó que quería «pedirle perdón» a Cristina Kirchner y dijo que «nunca se imaginó» que iba a terminar involucrado en este caso, que tiene como principal imputado a Fernando Sabag Montiel, quien disparó el arma contra la ex presidenta.
«No lo quiero tomar como excusa, pero estábamos tomando un fernet, el alcohol era habitual. Estaba entonado y empecé a mandar mensajes. Les juro que nunca me lo tome con la seriedad que tenía que ser. Hace un año y nueve meses que me estoy castigando por esto. Lo que dije nunca fue cierto, fue en joda», expresó Carrizo.
Y agregó: «En ningún momento le di un arma alguien, nunca tuve un arma en mi mano, nunca disparé. Yo no sé nada de eso».
El juicio se lleva adelante en los tribunales de Comodoro Py y está previsto que todos los miércoles se realicen audiencias. Se estipula que la ex presidenta podría prestar declaración después de la feria judicial de invierno.