Tras más de siete años, comenzó ayer el juicio por la explosión de la Química Raponi en barrio Alta Córdoba de la capital cordobesa. En la Cámara 4ª del Crimen de Córdoba, el dueño de la firma, el abogado Sergio Hilton Raponi, se sentó en el banquillo de los acusados imputado por estrago doloso.
En el inicio del juicio, la acusación hizo hincapié en las maniobras de Raponi por cubrir las aberturas que comunicaban su inmueble ubicado en Avellaneda 2971 (que estaba declarado) con el inmueble de pasaje Cordeiro 938 (no declarado), lugares donde, según la investigación, almacenaba sustancias químicas incompatibles.
“El imputado Raponi, contribuyendo aún más a la creación del riesgo de la posible mezcla de sustancias incompatibles, hizo instalar un desagüe desde las fugas de su empresa a su red cloacal domiciliaria”, sostuvo la acusación. En ese sentido, alegaron que, al momento de arribar las inspecciones, los operarios debían cubrir esa abertura simulando ser vestuarios de trabajadores.
Por otro lado, la defensa de Raponi pidió unificar las querellas para brindar garantías al proceso. Para argumentar ese pedido, sostuvo que “los ocho querellantes particulares tienen similares intereses” y que eso implica “la vulneración de las garantías del debido proceso e igualdad ante la ley”. Además, solicitaron la nulidad de la acusación y el cambio de carátula a estrago culposo agravado.
En respuesta a ese pedido, el abogado querellante, Carlos Nayi, afirmó ante el pedido de modificación de la querella que “no es potestad de este tribunal ni de esta defensa resolver, impedir o limitar el número de participantes”. Nayi representa a las familias de María Angélica Cueto, víctima fatal del siniestro, y Pablo Amaya, gravemente herido y sobreviviente.
De esta manera, los ocho querellantes rechazaron ambos pedidos, y la primera audiencia finalizó. Ahora, el juicio pasó a un cuarto intermedio, que continuará en la jornada de hoy. El hecho ocurrió el 6 de noviembre de 2014, y la onda expansiva produjo una muerte, 70 personas heridas y daños en 393 viviendas de la zona.