Llevaba a sus hijos al colegio y lo mataron para robarle

El hombre intentó resistirse al asalto y uno de los delincuentes le disparó en la cabeza

Llevaba a sus hijos al colegio y lo mataron para robarle

Un hombre de 56 años fue asesinado ayer de un disparo en la cabeza delante de dos de sus hijos cuando al menos tres delincuentes intentaron robarle la camioneta en barrio Comercial al sur de nuestra ciudad. El trágico episodio tuvo lugar en el momento en que salía de su casa para llevar a su hija a la escuela.

El hecho sucedió alrededor de las 7, sobre Ischilín al 6.200, cuando Juan Carlos Luna (56) salía de la cochera de su casa conduciendo su camioneta Toyota acompañado por su hija adolescente, a quien llevaba a la escuela, además de otro hijo de 25 años. En esas circunstancias, el hombre fue interceptado por al menos cuatro delincuentes que pretendieron robarle el vehículo, momento en el que, aparentemente, se resistió y recibió un balazo en la cabeza por parte de uno de los agresores, quien huyó con sus cómplices sin lograr su cometido.

Desde la Policía indicaron que la adolescente y el hermano resultaron ilesos, en tanto que el padre fue trasladado hasta el Hospital Príncipe de Asturias, donde se constató que había fallecido como consecuencia del balazo. Al respecto, María, la pareja del hijo mayor de Luna, que fue testigo presencial del asesinato de su padre, aseguró ante la prensa que “uno de los delincuentes se subió a la camioneta para intentar el robo y que había otros tres esperando afuera”, y agregó que su novio aún se encuentra en “shock” y casi ni con ella pudo hablar.

En tanto, el sobrino del asesinado Luna expresó su dolor por el crimen de su tío. “No puede ser que te maten por un auto. ¿En qué país vivimos? ¿Les parece justo que te maten por robarte un auto?”, se quejó. “Andan en la calle como si nada matando gente, mientras la gente que se va a trabajar, que se levanta todos los días a las cinco de la mañana, tiene que cuidarse. Te tienen que matar porque te quieren robar el auto, no es así”, dijo el sobrino y agregó: “Dejen de matar gente, roben pero no maten”.

Según lo que consignaron los familiares, Luna era un trabajador de la construcción y todos los días tenía la rutina de salir en ese horario para llevar a su hija a la escuela y luego asistir a sus tareas laborales. La investigación está a cargo del fiscal de instrucción Víctor Chiapero, quien dio las directivas de rigor para tratar de identificar y detener a los responsables de crimen, aunque hasta ayer no había detenidos, ni trascendió si los agresores fueron identificados. Ahora, la Justicia trabaja sobre las cámaras de seguridad de la zona para intentar dar con detalles que sirvan para la identificación de los autores del crimen.

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