La jueza Loretta Preska, del Tribunal de Distrito Sur de Nueva York, rechazó el pedido del Gobierno argentino para suspender la sentencia que ordena transferir el 51% de las acciones de YPF al fondo buitre Burford, en el marco de un reclamo de US$ 16.000 millones por la nacionalización de la petrolera en 2012.
El Gobierno nacional había solicitado un “stay” para suspender temporalmente la sentencia y continuar con las acciones judiciales en Estados Unidos. Sin embargo, Preska mantuvo la medida y habilitó que se continúen las acciones ordenadas por el juzgado.
Defensa argentina y próximos pasos
La defensa sostiene que la orden viola el derecho federal estadounidense, la Ley de Inmunidades Soberanas Extranjeras (FSIA) y principios de cortesía internacional. Además, cuestiona un “ejercicio inconstitucional de jurisdicción extraterritorial” y señala que la Declaración de Interés del Departamento de Justicia, vinculada al gobierno de Donald Trump, respalda el fallo.
Argentina adelantó que seguirá presentando recursos y no descarta acudir a la Corte Suprema de Justicia de EE.UU. para una revisión.
Por otra parte, el Gobierno nacional indicó que no podrá entregar las acciones porque la operación debe pasar por el Congreso, según las leyes argentinas, lo que complica la ejecución inmediata del fallo.
La audiencia de emergencia convocada por Preska busca una negociación entre las partes, pero la resolución de este lunes mantiene firme la decisión judicial.